El defensa de Barcelona Gerard Piqué dijo que el exazulgrana Neymar da Silva ya les comunicó a los que entonces eran sus compañeros su decisión de fichar por PSG, en la boda de Leo Messi, que se celebró el pasado 30 de junio.
"A la boda de Leo, Ney ya vino con la idea de irse del Barça", explicó Piqué, quien también dijo que, cuando publicó aquel famoso 'tuit' de "Se queda", ya sabía que el internacional brasileño pagaría los 222 millones de su cláusula de rescisión.
"Utilicé mis redes sociales, porque era la última bala que me quedaba. Pensaba que si publicaba ese mensaje, igual él cambiaba de opinión. Ney se enfadó conmigo por poner aquel 'tuit', pero luego lo solucionamos", precisó.
Pese a que los jugadores invitados a la boda de Messi sabían que Neymar no seguiría, Piqué explicó que ninguno de ellos fue a contárselo al club para que su marcha no lo tomara por sorpresa: "Ese no es nuestro papel. Algunos tenemos una relación de amistad. El que se lo tenía que comunicar al club era Ney".
En cualquier caso, el central azulgrana pidió que no se juzgue a Neymar por irse: "Seguro que tiene sus razones para irse. Pasó cuatro años acá, nos dio un rendimiento extraordinario y nos dejó dinero en la caja. Debemos estar contentos y felices por haberlo tenido y guardar un gran recuerdo de él".
Preguntado por si le había decepcionado la forma en la que el delantero paulista dejó Barcelona, Piqué aseguró que todo lo contrario.
"Hay jugadores que se declaran en rebeldía y no se presentan con su club, y él ha luchado y se ha entregado hasta el último día por la camiseta del Barça, aun sabiendo que podía lesionarse", destacó.
Para Piqué, Neymar es un jugador único y no hay nadie en el mercado que pueda reemplazarlo: "Más que sustituir a Neymar, hay que aprovechar su partida para hacernos mas fuertes con la gente que venga, ser un equipo más competitivo y no intentar buscar un sustituto para él, porque no existe".
Al respecto, el central catalán es consciente de que fichar ahora, tal como esta el mercado estival, es complicado. "Los clubes se aprovechan de que estamos en un mercado inflacionado y de que el club ha recibido 222 millones. Cada uno utiliza sus armas", indicó.
Pese a la inesperada marcha de Ney y las dificultades para reforzarse que está teniendo la entidad azulgrana, Gerard Piqué negó que el Barça haya perdido su capacidad de seducción, "porque los jugadores que estamos intentando fichar (Coutinho y Dembélé), ya han demostrado que quieren venir".
En cualquier caso y mientras llegan refuerzos, Piqué aseguró que el plantel actual es "suficientemente competitivo" para volver a aspirar a todos los títulos.
El primero se lo jugarán el domingo ante Real Madrid, al que recibirán en Camp Nou, en la ida de las Supercopa de España.
"Jugar contra el Madrid siempre es especial y más si es un partido oficial. Empezamos la temporada delante de nuestra gente y queremos hacer un gran partido y ganar, obviamente, pero sabiendo que jugamos la vuelta el miércoles y que la Supercopa no se decidirá mañana", apuntó.
En este sentido, Piqué ahondó en las claves para ganar el 'clásico': "Tener mucha cabeza, intentar no recibir goles, porque penaliza mucho cuando encajas en casa, y controlar el partido, porque sabemos que en las contras son muy peligrosos".