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Piqué quema en España

Las críticas de Piqué en redes sociales a la actuación de la policía durante el Referéndum en Cataluña, provocó una respuesta inesperada en Madrid. EFE

BARCELONA -- Piqué quema en España. O, al menos, lo hace en la selección española. Su llegada a Madrid para integrarse en el equipo nacional fue recibida con un rechazo excepcional en la Ciudad de Las Rozas y a los insultos que recibió se sumaron reacciones extremadamente duras en su contra en las redes sociales e informaciones periodísticas que llegaron a poner en duda su permanencia a las órdenes de Julen Lopetegui.

Gerard Piqué vive en un laberinto de odio. Su actividad en las redes sociales criticando la actuación de la policía el domingo, durante la jornada del Referéndum en Cataluña, provocó una respuesta en Madrid que no podría esperarse. Y un rechazo nunca visto antes. Y eso que era difícil que al central del Barcelona pudieran atacarle más de lo que ya se le hizo en el pasado.

Mientras en la Cadena Cope Julen Lopetegui resistió una entrevista altamente agresiva, en la que se le cuestionó hasta la saciedad la permanencia de Piqué en el equipo nacional, el diario Marca publicó en primera plana que la situación en el vestuario hispano es “irrespirable” y el diario As, yendo incluso un paso más allá, insinuó que el central “podría dejar la selección”.

En dicha información se apuntó que su relación con Sergio Ramos está absolutamente rota y citando fuentes de la propia selección se afirmó que la presión que se ha instalado en el vestuario podría provocar que “abandonase la concentración”.

“Tengo la sensación de que no nos van a ayudar mucho los medios en este tema dado el cáliz que está tomando la situación” aseguró Lopetegui en la entrevista radiofónica, atajando como buenamente podía los ataques directos con preguntas continuadas y dirigidas a saber si podía decidir echar a Piqué.

En un ambiente enrarecido, con las redes sociales ardiendo en contra del jugador catalán y exigiéndole su abandono inmediato de la selección, de nada valió ni sus palabras, demostradas, respecto a su compromiso absoluto con el equipo nacional ni, tampoco, el que otros deportistas se hayan manifestado respecto a lo sucedido en Cataluña este domingo.

Pau Gasol, cuya imagen es inmaculada en toda España, no pudo por menos que exclamar su pesar y también lo hizo su hermano Marc, quien fue un poco más allá recordando que “no se puede tratar con violencia por querer manifestar una voluntad pacíficamente”. Ambos, nacidos en una ciudad muy cercana a Barcelona, no entraron a polemizar tal y como sí lo hizo, no es una novedad, Gerard Piqué, pero el mensaje, el de todos, era evidente y claro.

Pero Gerard, el central del Barcelona cuya imagen lleva ya muchos años siendo puesta en condicional cuando no atacada en muchos lugares de España, se ha convertido ya en una suerte de enemigo nacional.