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BARCELONA -- Las ocho victorias ligueras que encadenó de salida el FC Barcelona en la temporada 2013-14, bajo el mando de Gerardo Martino, seguirán siendo históricas en el Camp Nou. Áquel es el récord que se mantendrá, al menos, otro año después de que al líder de Valverde le frenase el Atlético en el Metropolitano. El Barça se estrenó en el nuevo estadio del Atlético y cumplió el gafe que le persigue en las dos últimas décadas. No fue capaz de ganar, como le ocurrió en Anoeta, en San Mamés, Cornellà o Son Moix, y arrancó una igualada que acabó por saberle a poco en el marcador, aunque futbolísticamente debió marcharse con buen sabor de boca. Buen sabor de boca por cuanto el equipo de Valverde no bajó los brazos nunca, no rebajó la intensidad de su fútbol jamás y mantuvo la compostura y su filosofía de principio a fin. Pudo ganar hasta el minuto 93, cuando Messi forzó la enésima falta al borde del área y su disparo lo atajó con solvencia Oblak para alegría de la hinchada colchonera, consciente de haber sobrevivido a un partido enorme. Unos pudieron esperar más y los otros conformarse con menos, a la vista de un duelo sin descanso y al que respondió con grandeza el equipo de Simeone y con bestialidad el de Valverde. Un golazo de Saúl y otro de Suárez resumieron el primer partido de Liga que no vence el Barça en esta Liga, que seguirá dominando en la clasificación y que debería, en buena lógica, mantenerle la confianza. “Estoy contento con todos. Ha sido un gran partido y aunque siempre quieres ganar, cuando no es posible hay que valorar un empate como éste” resumió el entrenador del Barcelona, para quien debe valorarse, por encima de todo, este comienzo exelente de campeonato de su equipo. Messi comenzó a los 30 segundos y Messi acabó en el minuto 93. Fue el inicio y final, el resumen, de un encuentro que se le escapó al Barça porque la defensa numantina del Atlético le mantuvo en pie contra viento y marea para convertirse en el primer equipo que en esta Liga le pone el freno al líder. “Nos faltó sostenernos en la segunda parte, no acertar en algún contragolpe… Pero hay que estar contentos” respondió Simeone, quien elogió la personalidad del Barça y, por encima de todo, resaltó la fortaleza del Atlético. Una fortaleza que le dio a los suyos un empate soberbio.
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