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Barcelona, ante una prueba de fuego en San Mamés

BARCELONA -- El estadio en el que el Barcelona de Luis Enrique encajó su primera gran goleada, a manos del Athletic de Ernesto Valverde, recibirá este sábado al líder invicto de la Liga, bajo el mando precisamente de Valverde y con el equipo azulgrana con un papel de favorito indiscutible.

El Athletic, undécimo en la Liga, solamente ha ganado uno de los últimos nueve partidos oficiales y se presenta ante el líder después de empatar en Copa frente al Formentera, modestísimo equipo que ascendió a la tercera categoría del fútbol español y que provocó fuertes críticas al juego del equipo de Ziganda, quien admitió sin disimilo que a los suyos les falta “alegría y convencimiento”.

No disfrutan de su mejor momento, ni deportivo ni anímico, unos Leones que vencieron por la mínima al Barça en enero, en Copa, pero han perdido siete de los ocho últimos encuentros y que en Liga han caído en sus tres últimos duelos disputados en el nuevo San Mamés.

Con todo, “un equipo herido es más peligroso” se estima desde el vestuario azulgrana y, recuperando el entrenador a sus jugadores principales, el líder encara el choque con las reservas y respeto lógicos de enfrentarse a un equipo que históricamente le ha representado problemas en Bilbao y cuyo estadio se estima importante en la carrera por el título.

El Barça, que jugará conociendo el resultado del Valencia ante el Alavés, jugará esta jornada antes que el Real Madrid de Zidane, que visitará el domingo a un Girona que tras ganar en La Coruña ha recuperado el ánimo… Por más que se presenta como una víctima mucho más propicia, de entrada, de lo que pueda serlo el Athletic.

Una jornada que podría estimarse de compromiso pero que en el Bernabéu confían en que pueda atragantarse al líder, al que una victoria ya dejaría en tercer lugar de su mejor inicio liguero histórico, por detrás de las temporadas 2012-13 y 2013-14 pero que encararía el mes de noviembre con la moral por las nubes.