BARCELONA -- El FC Barcelona, esperando a que Lionel Messi tenga a bien sentarse con Josep María Bartomeu en un despacho de las oficinas del club para hacer oficial su renovación, ya piensa más allá y trabaja en la elaboración de un “contrato vitalicio”, tal como explicó el Director General Oscar Grau, para el crack argentino.
Una información publicada este jueves por el diario Mundo Deportivo confirmó lo adelantado por ESPN Digital, respecto a la intención que mantiene el Barça de cara a los ‘últimos años’ profesionales de Messi, cuya carrera global se quiere recompensar con un contrato especial, tomando el de Iniesta como ejemplo y ofreciéndole el poder de decidir en primera persona el momento y la forma de su adiós como futbolista azulgrana.
El Barcelona sostiene un absoluto mutismo respecto a la fecha en que pueda hacerse realidad esa ansiada foto de la renovación, que se asegura está “pactada y cerrada” hasta junio de 2021, con todos los contratos colaterales firmados con su padre y asesores... Pero a la espera de lo más importante de todo: la firma y foto del crack. A pesar de ello se traslada un discurso firme y alejado de cualquier alarma que pudiera existir. Hasta el punto de pretender ir más allá.
Cuando se cumple un mes y medio de la rúbrica de esa renovación de por vida que consumó Andrés Iniesta con el Barça, el siguiente objetivo es repetir la experiencia con el jugador franquicia de la entidad, dando a entender que Leo, siendo el indiscutible número uno, ha mostrado una fidelidad durante toda su carrera que merece ese trato especial.
COMPROMISO
El compromiso de Messi con el Barcelona se ha mantenido innegociable durante toda su carrera, viviendo solamente un episodio crudo, a partir de la denuncia acusándole de un delito fiscal que le llevó a ser juzgado y que provocó que por una única vez dudase acerca de su futuro.
En plena tormenta mediática, antes de que fuera sentenciado a 21 meses de cárcel, Pep Guardiola en primera persona llamó a su puerta. El entrenador catalán no le sedujo con ninguna oferta. Simplemente quiso saber su estado anímico y le dejó claro que llegado el caso de que se plantease dejar el Barça, el Manchester City le acogería con los brazos abiertos.
Nada de ello acabó por ocurrir porque Messi, en acuerdo con su padre y su familia, convino permanecer en la que considera su casa. A partir de ahí, aun sospechando que su relación con las altas esferas del Barcelona no sea la mejor, el futuro del crack se entiende atado al azulgrana y al Camp Nou.
¿Hasta cuándo? Eso es algo que solamente puede responder el propio Leo.