MADRID --La desventaja con respecto al Barcelona es bastante amplia, pero no insalvable para Zinedine Zidane. El técnico encara este sábado al reto más difícil de la temporada en el derbi madrileño frente al Atlético de Madrid. Transcurrido casi un tercio de la campaña, la distancia de ocho puntos con respecto al líder empieza a pesar y deja poco margen de error a los merengues. Pero el técnico no pierde las esperanzas en ‘remontar’ antes de que sea demasiado tarde.
“Es cierto que para muchos estamos muy por detrás del Barcelona, lo sé; pero hay tiempo de sobra para alcanzarlo y superarle. No lo estamos haciendo mal; lo podemos hacer mejor, claro, y lo vamos a intentar”, señaló el técnico en rueda de prensa celebrada este viernes tras el último entrenamiento del Real Madrid previo al encuentro.
El encuentro podría dejar sellada la suerte de uno de los dos. Y no para bien. Empatados a 23 unidades, a una distancia de ocho puntos del líder con 11 jornadas disputadas, a lo máximo que pueden aspirar, este fin de semana, es a afianzarse en el tercer puesto y mantener el paso. Para el perdedor significará rezagarse en hasta 11 puntos, si Barcelona vence al Leganés, y prácticamente decir adiós a sus aspiraciones al título. Algo en lo que el Real Madrid no puede permitirse ni pensar a estas alturas de la temporada.
“No quiero pensar en esto porque la vida no es éxito o fracaso; sería muy duro. Para mí lo importante es cómo trabajamos y si damos todo en el campo creo que tendremos un buen resultado”, expresó el entrenador, quien sin embargo reconoció que “claro” que quiere que Leganés le allane el camino venciendo a Barcelona.
“Claro (quiere que gane); pero no va a cambiar nada si gana Barcelona. Veremos qué va a pasar. Van a jugar antes, pero independientemente de todo eso sabemos lo que tenemos que hacer”, dijo.
El derbi se ha ‘encarecido’ para el Real Madrid en los últimos años. Es un choque que se ha emparejado desde 2013 en que el Atlético dejó de ser esa ‘víctima perpetua’ que hiló 25 partidos sin ganarle al vecino. Esta vez la igualdad viene de las penurias: con ambos entrenadores rodeados de dudas, estilos de juego que no convencen, y con sus respectivas delanteras estrella en franca sequía.
“Ninguno de los dos (llega peor). Queremos ganar y vamos a intentar hacerlo, pero el rival igual. Va a intentar ganar el partido y ya está. No hay mejor o peor. Tenemos los mismos puntos, ¿no?”, dijo Zidane.
El entrenador francés no se fía del mal momento del Atlético – que, sin embargo, marcha invicto con seis victorias y cinco empates – y aseguró que el rival “no está peor” que la temporada pasada (en que el Real Madrid solo perdió un encuentro de los cuatro que disputó frente a su vecino y obtuvo dos victorias por 3-0, una en Champions y otra en Liga a domicilio).
“Como siempre, yo pienso bien de este equipo. No los veo peor. Es un equipo contundente que sabe a lo que juega y va a hacer un buen partido. Vamos a intentar hacer las cosas para molestar. No veo al Atlético peor que el año pasado”, dijo.
En cuanto a la sequía de sus delanteros Karim Benzema y Cristiano Ronaldo, que no han marcado en tres partidos de Liga y apenas llevan un tanto cada uno en la competición, señaló que la solución está en que se trata de “un buen partido” para romper la mala racha.
“Yo lo que quiero para mis delanteros es que estén bien. Ellos lo intentan y espero que mañana sea un buen partido para que Karim y Cristiano puedan marcar”, señaló.