|
MADRID -- Saúl ha defendido a Antoine Griezmann a capa y espada después de que la grada del Wanda Metropolitano volviera a despedirlo con una rechifla. Su técnico, Simeone, con algo más de reservas. “A muerte con él”, pero solo hasta que deje de llamar ‘casa’ al feudo rojiblanco. “A los que son de mi familia, hasta el día que están en mi familia, a muerte con ellos. Menos ahora, que ya tengo casi 50. Hasta el día que estén (en la familia), claro”, dijo Diego Simeone a modo de ‘defensa’ de su delantero. El creciente rumor de su posible partida rumbo a Manchester o Barcelona – que bien podría producirse este mismo invierno, en cuanto el Atlético pueda inscribir a Diego Costa y Vitolo - ha provocado una animadversión que se ha visto agravada por una mala racha. Por sexta ocasión consecutiva en la Liga, el francés se ha marchado en blanco. Y la afición no lo ha perdonado. De nuevo ha sido despedido con una rechifla cuando salió de cambio a 15 minutos del final en el derbi frente al Real Madrid que se saldó con un empate 0-0. El vestidor ha reprobado la actitud de la afición con su compañero. “Cuando meta goles la gente le va a aplaudir. Por eso creo que no deberían haberle pitado”, dijo Saúl Ñíguez tras el encuentro. “Estamos todos con él. Aporta mucho en el campo y fuera también. Transmite esa alegría y esa locura. Siempre está trabajando para el equipo. Cuando yo vea que no está centrado y no está aquí podemos pitarle. Pero está trabajando al ciento por ciento. Está en una mala racha, es verdad, pero tenemos que estar con él”, dijo el canterano del Atlético de Madrid. Saúl apeló a esa “unión” casi familiar de los colchoneros con su afición, al tiempo que recordó que cuando Griezmann “está bien, el equipo está bien porque es súper importante” para el Atlético de Madrid. Al fin y al cabo, es uno de los jugadores de mayor talento en la plantilla lleva tres temporadas consecutivas estableciéndose como máximo goleador de su equipo. Pidió confianza y que se “valore” lo que hace. Simeone, sin embargo, dejó un mensaje inequívoco, no hacia la grada, sino hacia el interior: lo primero es el “trabajo” y después está el “talento”. “Estamos en un periodo donde no podemos encontrarnos con el gol fácilmente. La del primer tiempo de Correa hubiese cambiado el partido un montón. Pero fueron 30 minutos en la primera parte del encuentro de lo que somos nosotros. Trabajo, trabajo, trabajo… Y después talento”, dijo Simeone. “Tienen que aparecer todos porque con uno solo no podemos ganar un partido”, recalcó. “A los que son de mi familia, hasta el día que están en mi familia, a muerte con ellos. Menos ahora, que ya tengo casi 50. Hasta el día que estén (en la familia), claro”, dijo Diego Simeone a modo de ‘defensa’ de su delantero. El creciente rumor de su posible partida rumbo a Manchester o Barcelona – que bien podría producirse este mismo invierno, en cuanto el Atlético pueda inscribir a Diego Costa y Vitolo - ha provocado una animadversión que se ha visto agravada por una mala racha. Por sexta ocasión consecutiva en la Liga, el francés se ha marchado en blanco. Y la afición no lo ha perdonado. De nuevo ha sido despedido con una rechifla cuando salió de cambio a 15 minutos del final en el derbi frente al Real Madrid que se saldó con un empate 0-0. El vestidor ha reprobado la actitud de la afición con su compañero. “Cuando meta goles la gente le va a aplaudir. Por eso creo que no deberían haberle pitado”, dijo Saúl Ñíguez tras el encuentro. “Estamos todos con él. Aporta mucho en el campo y fuera también. Transmite esa alegría y esa locura. Siempre está trabajando para el equipo. Cuando yo vea que no está centrado y no está aquí podemos pitarle. Pero está trabajando al ciento por ciento. Está en una mala racha, es verdad, pero tenemos que estar con él”, dijo el canterano del Atlético de Madrid. Saúl apeló a esa “unión” casi familiar de los colchoneros con su afición, al tiempo que recordó que cuando Griezmann “está bien, el equipo está bien porque es súper importante” para el Atlético de Madrid. Al fin y al cabo, es uno de los jugadores de mayor talento en la plantilla lleva tres temporadas consecutivas estableciéndose como máximo goleador de su equipo. Pidió confianza y que se “valore” lo que hace. Simeone, sin embargo, dejó un mensaje inequívoco, no hacia la grada, sino hacia el interior: lo primero es el “trabajo” y después está el “talento”. “Estamos en un periodo donde no podemos encontrarnos con el gol fácilmente. La del primer tiempo de Correa hubiese cambiado el partido un montón. Pero fueron 30 minutos en la primera parte del encuentro de lo que somos nosotros. Trabajo, trabajo, trabajo… Y después talento”, dijo Simeone. “Tienen que aparecer todos porque con uno solo no podemos ganar un partido”, recalcó.
|
