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'Un Clásico' condenado a ser un evento de "alto riesgo"

MADRID - Con la capital española en víspera de Nochebuena y a dos días de que se lleven a cabo las elecciones en Cataluña, que vive una tensa situación desencadenada tras la celebración del referéndum por la independencia del 1 de octubre, se esperan medidas y controles estrictos en el dispositivo de seguridad para el Clásico de La Liga, algo similar a lo que ha ocurrido desde hace dos años.

El choque entre Real Madrid y Barcelona del próximo sábado en el Santiago Bernabéu será previsiblemente declarado de "alto riesgo" durante la reunión de la Comisión Permanente contra la Violencia, el Racismo, la xenofobia y la Intolerancia en el Deporte que se celebrará a media semana.

España se encuentra en alerta terrorista nivel 4 desde junio de 2015 y desde mediados de agosto, en que los ataques en Barcelona y Cambrils dejaron un saldo de 15 personas asesinada, la seguridad se ha reforzado en las zonas turísticas. Como el estadio Santiago Bernabéu y sus aledaños.

El partido 'grande' de la Liga suele ser el más vigilado en España y desde noviembre de 2015, tras los atentados terroristas en París, se ha desarrollado bajo medio de medidas de seguridad sin precedentes. Participaron, entonces, más de 2,500 efectivos de seguridad; alrededor de 1,100 agentes de la policía nacional y 1,400 personas entre la seguridad privada contratada por el club, Policía Municipal, Servicios de Emergencias y Protección Civil.

Se estableció un triple anillo de seguridad en los aledaños del estadio y controles exhaustivos. Se prohibió la entrada con mochilas y ya desde la víspera, agentes de la Policía Nacional se encargaron de revisar el alcantarillado y los vehículos estacionados en las inmediaciones.

Aquel partido marcó un antes y un después en los operativos de seguridad en todos los estadios españoles. Se disputó poco después de los trágicos sucesos en París en noviembre de 2015 e incluso se temió su suspensión.

El club, quiso evitar la psicosis y se mantuvo firme en su mensaje de tener todo bajo control duplicando al personal de seguridad privada en el estadio. No ha bajado la guardia desde entonces.

Real Madrid ejerce un férreo control en cuestión de seguridad. Ha mantenido el número de agentes de seguridad desde 2015 y registra la entrada y salida de personal temporal, o externo, antes y durante los partidos mediante la identificación de huellas digitales.

También las autoridades se han mantenido alertas desde aquel clásico. Ha aumentado la cantidad de efectivos que blindan los estadios, incluso en partidos que no son declarados de alto riesgo. Como ocurrió el derbi entre el Atlético de Madrid y Real Madrid de noviembre, el primero en disputarse en el Wanda Metropolitano. El partido no fue declarado de alto riesgo, y aun así participaron cerca de 1,200 efectivos de seguridad.

Y aunque el Bernabéu no ha vuelto a ver un número tan elevado de agentes - han oscilado entre los 1,700 y los 1,800 en partidos de alto riesgo, sobre todo en Champions League - la sensible fecha en que se disputará el partido ocasionará mayor afluencia de fuerzas de seguridad, pues coincidirá con el dispositivo especial por navidades.

Desde el pasado 1 de diciembre, y hasta el 7 de enero, el Ayuntamiento de Madrid puso en marcha un Centro de Coordinación de Seguridad durante los fines de semana, festivos y víspera de festivos. Días como el próximo sábado 23 de diciembre.

Madrid, para entonces, estará a rebosar ya que se espera la llegada de miles de turistas nacionales y extranjeros durante el fin de semana navideño. Durante el puente de la Constitución, que tuvo lugar del 6 al 9 de diciembre, la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid registró una ocupación media superior al 75 por ciento, un incremento del 4 por ciento al mismo periodo en 2016. Se espera un crecimiento similar para esta semana.