BARCELONA -- El Barça, que de acuerdo con el calendario actual de la temporada, puede verse abocado a jugarse sus opciones de ganar los 3 títulos en disputa en un plazo de apenas 10 días, trabaja la opción de cambiar la fecha de la final de Copa programada para el 21 de abril, una circunstancia que aseguró desconocer Ernesto Valverde… Quien sin embargo puso énfasis en el interés deportivo del equipo.
El lunes debe celebrarse una reunión entre los dos finalistas y la federación en la que deben comenzar a sentarse las bases de dicho partido, encontrar una sede, con la polémica que ello ya provoca, y, también, solventar el asunto de la fecha definitiva, que podría trasladarse al nueve de mayo atendiendo al calendario de ese mes de abril.
Para el Barça, la final de Copa el 21 de abril llegaría tras enlazar dos jornadas de Liga frente a Valencia en el Camp Nou y Celta en Balaídos, cuatro días antes, y con la posibilidad de jugar la ida de las semifinales de la Champions tres o cuatro días después. Una maratón poco menos que infernal.
“Si a principio de temporada nos hubieran dicho que podíamos estar en esta situación lo hubiéramos firmado” se sonrió el entrenador azulgrana ante la cuestión planteada por ESPN, dando por sentado que llegado el momento “el club decidirá lo correcto. No he tenido tiempo de mirar todas esas cuestiones pero estoy convencido de que el Barça hará lo posible por ayudar al equipo”.
La final de Copa frente al Sevilla ha comenzado ya a ganarse un lugar en la polémica “de cada año” solventó Valverde quien bromeó al ser inquirido por cual sería su escenario ideal para jugar ese partido: “El perfecto sería en el que ganáramos”.
“Nuestro trabajo era clasificarnos y de lo otro que se ocupen otros…”, quiso concretar el técnico azulgrana, reconociendo que este asunto “no es una de mis grandes preocupaciones, aunque lo ideal sería saber siempre donde se va a jugar la final para evitar todas estas especulaciones”.