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Neymar vivió la eliminación del Paris Saint-Germain a manos del Real Madrid en Champions League lejos de la cancha, en su mansión, ubicada en Brasil, debido a una lesión en el tobillo derecho. Dos días después de que los merengues los eliminaran, se cumplió un año de la épica remontada del Barcelona a los parisinos, donde el atacante brasileño fue clave; ahora, está lejos de esas alegrías. El 14 de febrero del 2017, los parisinos vivieron más que amor y amistad en el Parque de los Príncipes al vencer 4-0 a los culés en la ida de los octavos de final con doblete de Ángel di María, mientras que Julian Draxler y Edinson Cavani complementaron el marcador. En esas épocas, el posible traspaso del nacido en Sao Paulo, Brasil, eran rumores, nada más. Él mismo fue importantísimo en esa victoria inimaginable blaugrana en la vuelta, el 8 de marzo del 2017, lejos de las noticias de un posible traspaso. El Barça vino desde atrás y con dos dianas de Neymar en la recta final del encuentro, lograron lo imposible: derrotar 6-1 al París y pasar de ronda. Después de eso vino la eliminación del Barcelona en cuartos de final a manos de la Juventus y llegó una tormenta millonaria para Ney. Los parisinos se esforzaron en ficharlo, estira y afloja con los azulgranas, miles de noticias en medios alrededor del mundo y el cheque de 222 millones de euros para lograr su traspaso. El brasileño se convirtió en la contratación más cara en la historia del balompié mundial. Sin embargo, se encontró una tormenta en el PSG. Un año después, lejos del Barcelona y de la gloria de la Champions League con los franceses, se recupera en su mansión en Brasil, en medio de incógnitas.
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