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Jugar mal también es una estrategia. Atlético de Madrid venció al Deportivo La Coruña por 1-0 y se dio de santos. Las condiciones a las que llegó al partido resultaban tan adversas, que una victoria por la mínima gracias a un polémico penal y ante un equipo al borde del descenso, se acepta sin remilgos. Atlético sumó su novena victoria por 1-0 en 30 jornadas de Liga. Y ni técnico ni jugadores han tenido el menor empacho en colgárselo como medalla. Que “también es una virtud”, según afirmó Diego Simeone tras el encuentro. “Es verdad. Ganamos con lo justo y no podemos decir otra cosa. Pero también es una virtud”, dijo el entrenador del Atlético de Madrid. Las circunstancias se lo exigieron hoy más que en cualquier otro momento. En un plantel de 19 jugadores, había seis bajas. Sancionados Griezmann y Vitolo; tocados Giménez, Juanfran y Vrsaljiko. Además de Filipe Luis; la baja por lesión más dolorosa, por inesperada y por grave, pues no volverá hasta la próxima temporada. De frente, diez días de gran desgaste físico y mental. La eliminatoria de cuartos de final de Europa League y un derbi ante el Real Madrid en el que los rojiblancos se juegan “su” Liga: amarrar el segundo puesto de la clasificación y esperar casi un milagro – que el Barcelona pierda nueve puntos de aquí al final. El Atlético de Madrid tenía que hacer lo que fuera necesario sin arriesgar de más. “Siempre volver de la selección a tan poco tiempo del Mundial no es fácil. Teníamos encima la dificultad de los suspendidos y los tocados y creo que respondimos con el resultado, que era lo que necesitábamos”, dijo Simeone. Por esa misma necesidad se mostró orgulloso, incluso, de la actuación de Ángel Correa, pese a no haber tenido suerte frente al marco y haber perdido demasiados balones para su gusto. Porque, ante los ojos del Cholo, hasta para “jugar mal” se requiere talento. “A mí, Ángel me gusta siempre; más allá de los pasajes de pérdida de pelota es el más vertical que tenemos y saca partido verticalmente de una jugada peligrosa. Creemos en él. Hoy no ha sido uno de sus mejores partidos, pero lo sostuvo. Y eso me pone contento. Hay que saber jugar mal y acomodarse; sobre todo en una Liga tan larga”, sostuvo. Aun así, el Atlético se mantiene como el único equipo que le puede pelear la Liga al Barça. Y al menos hasta que las matemáticas y Lionel Messi lo permitan, los colchoneros seguirán “mirando hacia delante”, intentando “mejorar los números de la temporada pasada”. Y es que en el Atlético no hay espacio para el autoengaño. De momento, miran al derbi del próximo domingo en el Santiago Bernabéu. “Un partido clave para matar esa segunda plaza y para nosotros es un objetivo importante”, según el capitán rojiblanco Gabi Fernández. Después verán si les alcanza, o no, para algo más. “Desde hace siete años que llegó el míster hemos quedado todas veces terceros menos la temporada ganamos (2014). Ojalá lleguemos a las últimas con opciones, pero que el Barcelona pinche, está complicado”, reconoció el mediocampista.
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