|
BARCELONA -- FC Barcelona y Sevilla disputarán la Supercopa de España a un solo partido, el 12 de agosto y muy probablemente en el Wanda Metropolitano de Madrid. La decisión estaría ya tomada, de acuerdo con los dos clubes, y solo pendiente de abordar con las televisiones que poseen los derechos del evento (firmado a doble partido) este cambio que, según el presidente de la federación, será “excepcional” porque a partir de la próxima temporada volverá a jugarse a ida y vuelta. La disputa a un partido, avanzada por ESPN a principios del mes de junio, se entiende por la imposibilidad de encontrar fechas en un calendario cargadísimo y la negativa del Barça a jugar la ida el 5 de agosto, fecha prevista inicialmente, por estar aún en la gira por Estados Unidos. Una fuente del club azulgrana ya explicó en su día que el Barça había concretado su viaje a Estados Unidos con antelación a cualquier comunicación desde la federación respecto a las fechas de la Supercopa, por lo que no podía hacerse responsable de ninguna polémica en este asunto. “Si se resuelve el contrato de televisión es muy probable que el 12 de agosto sea la final de la Supercopa, en campo neutral, por única vez”, apuntó Luis Rubiales en unas declaraciones a la Cadena Ser, en las que admitió que tanto Barça como Sevilla “me han transmitido su disposición a jugarla a partido único”. EXCEPCIONALIDAD
“El año que viene volverá a ser a doble partido”, aclaró el presidente de la federación, alertando de la necesidad de cuadrar los calendarios con la Liga con la suficiente antelación para no entrar en un conflicto que en esta ocasión causará un perjuicio económico a los dos clubes contendientes y que ya han avisado que esta excepcionalidad no debe volver a producirse. Las palabras de Rubiales siguieron a las declaraciones, horas antes, del presidente de la Liga, Javier Tebas, en las que se mostró favorable a jugar la Supercopa a un partido porque “a estas alturas es la mejor solución”, aunque dejando claro que todo el problema surge desde la federación. “La Liga es un invitado a esta fiesta porque esa no es nuestra competencia”, solventó Tebas, constatando las diferencias de criterio que se mantienen entre los dos organismos en una relación, más allá de las imágenes públicas, muy fría. El presidente de la federación no quiso confirmar que el partido vaya a disputarse en el estadio del Atlético de Madrid porque hasta que el acuerdo entre todas las partes no sea oficial no podrá negociarse la sede con el club propietario del estadio, pero la seguridad existente respecto a la negativa de los dos contendientes a jugar en el campo rival y la necesidad de encontrar un escenario con el mayor aforo posible que sea, más o menos, equidistante con Barcelona y Sevilla colocan en el escenario principal al Metropolitano... Constatándose que el Real Madrid sigue firme en su negativa a ceder el Bernabéu para un encuentro en el que, no siendo protagonista, sí pueda levantar un trofeo el máximo rival.
|
