MADRID -- Marcos Llorente desembarcó este viernes en el Atlético de Madrid luego de firmar un contrato por las próximas cinco temporadas. Llevará el dorsal ‘14’. El de Rodri.
Rodrigo Hernández aún no abandona el club, pero es casi anecdótico. El jugador ya avisó a la directiva que se marchará a partir de la próxima semana, cuando el Manchester City acuda a pagar su cláusula (70 millones de euros). Su marcha se vislumbraba como un duro golpe para el Atlético de Madrid, pues en solo un año se estableció como un jugador fundamental en el esquema de Diego Simeone.
El hueco era difícil de llenar; pero mucho antes del regreso del canterano, el Cholo ya se había fijado en Llorente para ocupar esa posición.
“El míster habló conmigo; me dio la bienvenida, me transmitió su confianza”, afirmó Llorente durante su presentación como jugador del Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano.
La gran oportunidad de reclutar al medio de contención ideal para su esquema llegó cuando a Llorente le informaron en su antiguo club, el Real Madrid, que no entraba en los planes de Zinedine Zidane y ya antes de que concluyera la campaña, el madrileño empezó a acercarse al Atlético.
Para Llorente era exactamente el cambio de aires que necesitaba, aunque no fue fácil, pues en el Real Madrid preferían cederlo, y a manera de lo posible, evitar que acabara recalando en la casa del vecino.
Pero el jugador de 24 años “tenía claro” su objetivo y no quiso escuchar más ofertas. El traspaso se saldó después de casi un mes en 40 millones de euros.
“Yo tenía claro que quería venir a un proyecto ambicioso y lo más importante que confiaran en mí y apostaran por mí. Aquí tengo las dos cosas”, afirmó Llorente.
“Poco puedo decir del Cholo que no sepan; es un gran entrenador con un carácter único. Estoy encantado de estar a sus órdenes. El proyecto y él me atraían mucho y cuando saltó el interés por mí no dudé en venir”, agregó.
El caso de Llorente es especial; es el primer jugador con pasado madridista que llega directamente desde las filas del máximo rival desde 2006 en que el Atlético fichó a José Manuel Jurado.
La situación, reconoció el mediocampista “es poco común”, pero asegura que su pasado blanco no supone una presión añadida para triunfrar en el Atlético.
“Lo llevo con naturalidad. Sé que es poco común esto que ha pasado pero era lo mejor para mí y estoy feliz de venir aquí con todo mi trabajo y todo mi compromiso para ayudar a este equipo en todo lo que necesite y luchar por esta camiseta”, dijo Marcos Llorente.
“Vengo aquí a ayudar; si me necesita el equipo voy a estar ahí. sí que creemos que era lo mejor para mí por el juego y el gran club que es. muy contento de estar aquí y con muchas ganas de conocer a mis compañeros”, agregó.