BARCELONA -- El fichaje de Borja Iglesias por el Betis, uno de los grandes culebrones del verano, se cerró este miércoles, cuando el club andaluz solventó un acuerdo con el Espanyol para incorporar al futbolista, pagando los 28 millones de euros establecidos en su cláusula, aunque acordado como un traspaso que el Betis abonará en tres plazos.
El delantero, de 26 años, se sumará a la plantilla de la que forman parte los mexicanos Lainez y Guardado con el objetivo claro de mejorar la discreta imagen goleadora ofrecida durante esta temporada y podría estar en condiciones de debutar el domingo, en el estreno liguero del Betis como local frente al Valladolid.
Borja se convierte en el quinto fichaje que cierra el Betis este verano y el segundo en orden de importancia tras el de Nabil Fekir, procedente del Olympique de Lyon aunque, de entrada, es el más costoso a la espera de conocer si se cumplen los variables que el club andaluz acordó con la entidad francesa.
La incorporación del delantero gallego, por quien el Espanyol mantuvo desde un primer momento que solo abandonaría el club a través del pago de su cláusula, se desbloqueó para el Betis en cuanto acordó la salida de Lo Celso con destino al Tottenham, cedido por 16 millones de euros y por quien en junio de 2020 los Spurs deberán pagar otros 42 millones.
Pedido personal de Rubi, quien le tuvo a sus órdenes el pasado curso en el Espanyol, Borja dejará en las arcas del club blanquiazul un beneficio de 18 millones de euros por cuanto fichó hace un año procedente del Celta por 10 millones. El trato entre Betis y Espanyol establece un primer pago inmediato de 18 millones y otros dos de 5 en los meses de diciembre y junio de 2020, firmando el jugador un contrato de cinco temporadas.