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NIZA -- La tranquilidad con que se vivió el estreno de la selección española en Toulouse, donde estuvo acompañada por más de 8 mil aficionados en el partido frente a la República Checa, se ha desvanecido de sopetón. Si los aficionados radicales turcos aún no se dejaron ver en días pasados, se conoce el desplazamiento de varios centenares de ellos para el encuentro en Niza ante la Roja, y para redondear la alarma, las autoridades francesas recibieron una comunicación no mucho más tranquilizadora: un grupo de ultras del Real Madrid y del Atlético ya están en suelo francés dispuestos a organizar una batalla campal allá donde sea necesario. Su destino final, claro, es Niza, y fuentes de las fuerzas de seguridad alertaron que a pesar de que se conoce a través de lo indicado por la policía española que el grupo organizado no llegaría a los veinte integrantes, se teme que desde Barcelona se pudieran sumar por su cuenta otros grupúsculos. Y que, unidos a los fanáticos franceses que les apoyarían, estuvieran preparando una batalla en las calles de Niza enfrentados a los turcos. Conocidos como 'Suburbios', la seguridad que rodea a la delegación española tiene constancia de sus contactos con los hinchas radicales del Olympique de Marsella y del Olympique de Lyon, como ellos de extrema derecha, y que ya habrían dado a conocer a los turcos sus intenciones. TERROR CON LOS TURCOS
Por más que el gobierno francés ha decretado la Ley Seca en las ciudades donde se disputen encuentros y la UEFA haya amenazado con expulsar de la competición a la selección cuyos hinchas protagonicen incidentes (solo en el interior de los estadios), existe temor con que los desmanes ocurridos en la primera semana de competición vuelvan a producirse. Las fuerzas de seguridad francesas tienen constancia del viaje por carretera de un grupo de aficionados turcos que grabaron un video en el que empuñaban puñales y machetes de combate, a la vez que entonaban canciones amenazantes. 'Turcos, no sois bien recibidos', ha sido una de las pancartas que se ha hecho viral en las redes sociales francesas, exhibidas por ultras franceses de varios clubes que mantienen un odio declarado con los clubes otomanos. En Niza se espera la presencia de entre 10 y 12 mil aficionados españoles, superando el número que acudió a Toulouse, que no deberían provocar ningún altercado, como ya ocurrió alrededor del encuentro ante la República Checa, pero el carácter violento de los radicales españoles, por pocos que sean, unidos a sus 'colegas' franceses y enfrentados a los turcos provoca que tanto las autoridades locales como las fuerzas de seguridad francesas y los dispositivos desplazados desde España estén en alerta máxima.
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