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MANCHESTER - La fría reacción del portero de Manchester City, Claudio Bravo, al ser felicitado por Pep Guardiola tras su buena actuación en la serie de penales ante el Leicester por la Carabao Cup, le ha dado la vuelta al mundo, pero el portero andino se encargó de aclarar que mantiene una relación profesional con el catalán. Bravo, de 34 años, fue uno de los responsables directos para que el City siga con vida en el torneo copero y tras mostrarse muy contento al ser felicitado por sus compañeros al finalizar el duelo, el guardameta se comportó completamente diferente cuando Guardiola lo abrazó al lucir serio e incluso parecer un poco molesto. El chileno se limitó a señalar que no tiene una relación cercana con el estratega. "Es lo qué hay. Él se siente agradecido por las dos tandas en las que me ha tocado echarle una mano fuerte al equipo, pero más allá de eso no hay nada más que comentar", señaló el cancerbero a Radio Cooperativa. En la presente temporada, Guardiola se ha inclinado por el brasileño Ederson como su portero titular en la Premier League y Champions League, por lo que Bravo se ha tenido que conformar con jugar en la Carabao Cup, situación que no ha agradado al chileno, quien suma tres encuentros en el certamen copero y solo un duelo en el campeonato inglés. A pesar de su poca actividad con el City, Claudio Bravo descartó su llegada al River Plate para la próxima temporada porque destacó que su familia ha logrado acomodarse al ritmo de vida en Inglaterra. "Creo que falta mucho para eso (marcharse de Inglaterra). En la vida no todo es fútbol y mi mujer y yo estamos encantados de que los niños estén dominando el inglés a la perfección. Creo que esas son cosas que como familia valoramos al margen de si me toca competir o no", aseveró.
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