Con la salida de Omar Bravo, el ataque de Chivas recaerá principalmente en tres jóvenes: Marco Bueno, Ángel Zaldívar y Carlos Cisneros, sin embargo, el director técnico Matías Almeyda aseguró que les brindarán la confianza suficiente para que ofrezcan una gran temporada.
"Hay momentos en los que uno es joven y un momento en el que ya dejas de serlo. Esta confianza que les doy a ellos es para que ya se realicen como jugadores. Deseamos que nuestros delanteros hagan más de un gol, que puedan concretar cinco o seis en la temporada y el juego en sí los va a llevar a que puedan tener esa chance", expresó el entrenador argentino.
El también exfutbolista aseguró que apoyará de manera plena a sus artilleros pese a la poca experiencia que hoy acumulan. También se dijo consciente de que en algunos momentos habrán de equivocarse, y aclaró que buscará impulsar su crecimiento como jugadores.
"Si logran tener esa confianza que les pueda transmitir yo, y porque se equivoquen una vez los voy a sacar, ahí es donde entran esos jóvenes que son 'quemados'. Sabemos que son sus primeras armas y que les van a faltar cosas, pero lo importante es darles las herramientas para que crezcan", añadió en conferencia de prensa.
Sobre la presión que pudieran sufrir Bueno y compañía, el 'Pelado' fue muy claro: sólo se trata de un juego. "Nosotros trabajamos todos los días, tenemos mucho diálogo, demostramos cosas. Yo trato en lo personal de inculcarle a los jugadores que la presión en el futbol no debe de existir, porque es un juego", agregó Almeyda.