MÉXICO.- Jugar en cancha sintética, como lo hará Pumas el viernes en el Estadio Caliente de Tijuana, ya no es tema en la Primera División del futbol mexicano; además, parece haberse olvidado que es un generador de lesiones como se decía cuando ascendió el anfitrión Xolos en 2011 y Chivas estrenó casa en 2010.
Se presume que lastima los ligamentos (rodillas y tobillos), meniscos (rodillas) y el cartílago que protege las articulaciones.
“Puede ser peligrosa una cancha de este tipo, pero el peligro cuando desempeña una actividad física y de contacto siempre existe”, afirmó el goleador de Pumas Matías Britos.
Dice el delantero uruguayo-mexicano que dependiendo de si la cancha está en mejor estado o no pueden aumentar los riegos, “pero siempre los hay en el futbol”.
El equipo que dirige Juan Francisco Palencia hizo la primera parte de su entrenamiento en Ciudad Universitaria y la complementó en un campo artificial en las instalaciones del Tecnológico de Monterrey. Así se planeó para que los jugadores se acoplen un poco a las condiciones en que jugarán en Tijuana, dentro de la séptima fecha del Apertura 2016.
Al mediocampista Pablo Barrera no le cayó muy bien el terreno de juego. “Está muy duro; está mucho mejor la cancha de Xolos”, fue su comentario.
PARA ABRAHAM GONZÁLEZ NO ES NUEVO
Para el mediocampista español Abraham González jugar en el Caliente será su primera vez en México, pero no en su carrera. “Cuando yo estaba en el Barcelona B; en la Segunda División, sí que hay campos de sintético. Cambia mucho el bote del balón, cambian mucho los apoyos y la vedad es complicado, pero nos tenemos que adaptar”, comenta el refuerzo de Pumas, quien disputa su primer torneo en la Liga MX.
En la actualidad, la FIFA tiene registradas alrededor de 500 canchas no naturales en el mundo, sea de estadios profesionales, de entretenimiento o formación, y de acuerdo a palabras del expresidente de dicho organismo, Joseph Blatter, esta clase de superficies es el futuro del futbol, ya que se pueden utilizar todos los días.