MÉXICO -- La decisión del América por modificar el horario en sus juegos como local en el Apertura 2016 no ha sido benéfico. Ya sea en lo deportivo o asistencia, los resultados no están del lado del equipo que el próximo 12 de octubre cumplirá 100 años.
Fue durante el pasado Draft del futbol mexicano que el presidente deportivo, Ricardo Peláez, habló sobre esta modificación, la cual mencionó que generaría varios beneficios como: Mejores entradas, mayor descanso para los jugadores y evitar la contingencia ambiental.
A pesar de que las Águilas son el equipo que más cotejos ha recibido en el torneo, con siete, sus entradas con el horario de las 21:00 horas han ido a la baja en comparación con el pasado Clausura 2016.
Durante el primer semestre del año recibieron en la temporada regular nueve duelos. El promedio de lleno fue del 37 por ciento en sus dos primeros compromisos cuando el Coloso de Santa Úrsula aún contaba con un aforo para 91 mil aficionados y en sus siguientes duelos con la remodelación del lugar y la reducción a 81 mil personas el promedio fue del 51%.
Las mejores entradas fueron en contra del Cruz Azul en la fecha 7 y en la fecha 9 ante Morelia con 69 mil 442 y 67 mil 420 personas, respectivamente. Mientras que su peor ingreso fue en la cinco para el duelo contra Santos al registrar 27 mil 851 personas.
Estos números fueron en picadas para el presente campeonato, en donde su mejor entrada en siete duelos (hasta la fecha 11) se dio en el Clásico Nacional contra Chivas al tener a 61 mil 651 presentes, es decir el 76 por ciento del inmueble lleno. El fin de semana en el que las gradas lucieron desoladas fue ante Chiapas en la fecha 1 al tener a 23 mil 656 (29% de asistencia) y ante Morelia con 27 mil 455 (33% lleno).
* En las Jornadas 1 y 3 el aforo del Estadio Azteca era de 95 mil personas, en las siguientes bajó a 81 mil personas por la remodelación del inmueble.
MAYOR DESCANSO, PERO SIN BUENOS RESULTADOS
Peláez aseveró que en los torneos pasados jugando a las 17:00 horas “los jugadores nos dicen que comen y entran con un poco de flojerita por el ‘mal del puerco’, traes el sueñito y de noche no, hemos experimentado en Concachampions, llevamos mucho tiempo jugando a esa hora y el rendimiento ha sido bueno. Si nos gusta y a la afición también, lo seguiremos haciendo, si no, buscaremos otra opción, pero siempre pensando a la gente", los resultados contradicen lo dicho por el directivo en su tiempo.
El América disputa esta segunda mitad de año la Liga, Copa MX y Mundial de Clubes. La cúpula quiere lograr, al menos, uno de esos tres campeonatos, pero en el certamen marchan en la cuarta posición de la tabla y son la tercera peor defensa con 20 tantos recibidos. Si bien es cierto que los jugadores previenen el tema de la contingencia ambiental o evitan jugar cuando la calidad del aire es mala, el equipo solo ha sumado 18 de los 33 puntos que se han disputado.
Los azulcrema únicamente han ganado tres de los siete cotejos en su casa. Ganaron ante Chiapas y Toluca en la fecha 1 y 2, pero en sus siguientes compromisos fueron goleados 3-0 por Tigres, empataron 1-1 frente a Morelia, perdieron el Clásico Nacional contra Chivas por 3-0 y perdieron 2-0 ante León. El descalabro contra Los Esmeraldas trajo consecuencias. Por primera ocasión en la era Peláez – Romano se despedía a un técnico. Ignacio Ambriz dejó el cargo y a su relevo entró el argentino, Ricardo Antonio La Volpe, quien en sus dos primeros compromisos obtuvo la victoria en el Clásico contra Pumas por 2-1 y avanzaron a los cuartos de final de la Copa MX al derrotar a Veracruz.
VENDEDORES IGUAL SE QUEJAN
Los vendedores que se colocan cada día de juego en la explanada del Coloso de Santa Úrsula igual han visto afectaciones en sus ventas, debido a la poca afluencia de la gente y al horario de juego, ya que va terminando a las 23:00 horas.
“Antes era más accesible a las 5 de la tarde y salías y podías ir a una fiesta y ahora a las 9 la gente no viene. Afecta a la gente, porque al salir a las 11 la gente debe de buscar transporte. En el juego contra Pumas no vendí nada a la salida, porque la gente se va rápido y antes la gente se quedaba”, dijo Mariano, vendedor de playeras afuera del estadio.
Con su local en el mismo lugar desde la Copa Mundial FIFA de México 1986 comentó que la directiva alejó a los mejores clientes, los niños. “Ahora ya no vienen los niños y baja la venta. Los niños piden la playera o la bandera y la compran. Antes salían y había tiempo de ver los puestos, en este horario ya no, porque la gente ve y pregunta, pero ya no compra”.
Por su parte, Norma, quien tiene un puesto de tacos comentó que antes “se quedaban a festejar, a comer y ahora salen corriendo. Quizá venga igual de gente pero ya no se quedan. Antes la gente come y convive. Antes cerraba a las 8 y ahora cierro a la 1 de la mañana”.
Comentó que a pesar de colocarse las horas de trabajo son mayores, pero la venta no corresponde al esfuerzo realizado. “Todos los puestos se quejan de lo mismo y se pide que cambien el horario. En vez de que ganemos, perdemos. Antes vendía 30 kilos de tortilla y ahora solo vendo a jalones 10 kilos. Que regresen el horario de las cinco. Vendo en CU y se llena por jugar a las 12. La gente desayuna y come y vendemos mucho más que aquí”.