<
>

El Pulso: Chaco Giménez, sin fecha de caducidad

EL PULSO


CIUDAD DE MÉXICO -- Ya es visto solo como un 'relevo de lujo' bajo el pobre argumento de que tiene 36 años, como si la calidad y una vergüenza deportiva incomparable tuvieran fecha de caducidad.

Christian Giménez no ha ganado un título de Liga con el Cruz Azul, cuando con Pachuca se cansó de levantar trofeos; sin embargo, vestido de celeste tiene el mayor de los galardones: la gente lo quiere, lo aclama y lo respeta.

El sábado pasado ingresó en la parte complementaria ante Santos cuando La Máquina perdía 1-0, y en menos de 30 segundos tocó dos balones que convirtió en lienzos; abrió el campo, se hizo la luz. Avisó que con su presencia la historia daría un giro.

En plena Jornada 9 uno de los futbolistas más rentables de la última década en México sumaba apenas 54 minutos en la Liga, pero tenía por delante 45 para dejar constancia de que sigue vigente.

Hoy Paco Jémez debe saberlo: a los referentes no se les usa a cuentagotas ni en caso de emergencia, su presencia resulta obligada porque están habituados a lidiar con el protagonismo.

Cruz Azul gestó una gran reacción ante Santos y el segundo gol fue obra del ‘10’, el que siempre da la cara dentro y fuera del terreno de juego.

Omar Mendoza lanzó un centro desde la banda derecha y a la altura del manchón penal apareció el virtuosismo del Chaco para conectar de aire el esférico y sacudir las redes.

El estadio que ya estaba entregado a su ‘héroe’ estalló, mientras el veterano corría hacia la tribuna para brindar su obra. Esta vez el futbol fue justo con Giménez, quien encontró recompensa a su lucha interminable.

Chaco es casi tan lúcido con las palabras como con los pies, es un jugador que respeta a carta cabal su profesión, la camiseta que defiende, al rival y a la gente.

Tiene 36 años, sí, pero aún no fecha de caducidad.

CUADRO DE HONOR

León Revive

León cambió de técnico y también de rostro. Se fue Javier Torrente y con la llegada del uruguayo Gustavo Díaz, el equipo suma un par de victorias (Querétaro y Pachuca) que lo tienen en zona de Liguilla. La fórmula con el argentino estaba desgastada, además de que, según se sabe, la relación con los futbolistas ya no era la más sana, por ello el cambio de inmediato rindió frutos. Frente a los Tuzos brindaron un primer tiempo prácticamente redondo en el que consiguieron tres goles, suficientes para sentenciar el encuentro. Mención aparte merece Mauro Boselli, un delantero total que está plenamente identificado con los colores, que en las buenas y las malas siempre aparece y que en cada gol hace más grande su historia. Puede ser pronto para afirmar que ya despertó ‘La Fiera’, pero al menos ya lanzó un par de zarpazos.

REPROBADO

Atlas Tobogán

El Atlas se metió en un tobogán con caída libre. El equipo tuvo un arranque de torneo prometedor con dos victorias, pero poco a poco se fue desinflando de forma dramática al grado de que se cuestiona la permanencia de José Guadalupe Cruz. En el primer tiempo ante Monterrey no fue goleado de milagro y a cambio tenía un 1-1 sumamente fortuito; sin embargo, en el complemento aunque compitió mejor, un error en la agonía del juego lo condenó a una nueva derrota. El ‘Profe’ pondera la defensa de un estilo que busca agradar, un futbol elaborado y explotar el potencial ofensivo de Matías Alustiza y Milton Caraglio, pero por ahora las ideas están extraviadas, le falta confianza a los futbolistas y sin ésta es más factible que llegue la derrota.