MÉXICO -- El regreso de Marcelo Capirossi a Pumas, después de 25 años, tiene su razón de ser: que los guardametas del primer equipo den un paso de calidad a partir del Clausura 2018.
“Esa es la meta, que ya den ese paso de calidad que les está haciendo falta. Siempre hay cosas por mejorar; nunca se deja de aprender”, declaró a ESPN Digital el nuevo entrenador de porteros del equipo universitario.
Marcelo, quien como guardameta se formó en la cantera de Pumas, “pero con este equipo solo me tocó debutar en Copa y no en liga”, se está llevando una buena impresión de los porteros Alfredo ‘Pollo’ Saldívar, Bernabé Magaña y José Albert Castillo. “De ellos destaco la actitud muy positiva que tiene, dispuesta al trabajo, a las correcciones. Los veo con buenas condiciones, muy fortalecidos”.
Comenta que los tres están bien en todos los aspectos, física y técnicamente. “Conforme vayamos trabajando iremos corrigiendo detalles puntuales que van a mejorar su desempeño en el día a día”. En general, “los he notado muy bien. La recepción hacia mi persona fue bastante buena”.
Luego reveló que al margen de la cuestión técnica, le gusta trabajar mucho el aspecto psicológico, en aras de que los chavos por su juventud no pierdan el piso y mantengan siempre una buena actitud de partido.
Capirossi no se guardará nada, aunque por ahora se limitará al primer equipo. De vez en cuanto trabajará con chavos de las categorías Sub-20 y de Segunda División, cuando sea necesario que alguno de ellos entrene con el equipo que dirige David Patiño. “Los vamos a tener en la mira y seguramente estarán subiendo al primer equipo de vez en cuando”.
-¿Estás consciente que la afición espera mucho de los refuerzos, incluyendo a los que llegan al cuerpo técnico? “Siempre hay exigencia y más en un equipo grande; es la exigencia normal. Estoy preparado y más sabiendo en donde estoy”.
En su trayectoria de entrenador ha habido un detalle recurrente: casi todos los porteros con los que trabajó fueron convocados a la Selección Nacional por primera vez o de nueva cuenta, como William Yarbrough, Moisés Muñoz, Miguel Ángel Fraga, el chileno Miguel Pinto y el árabe Waleed Abdullah.
DE LA ÉPOCA DE RÍOS, CAMPOS Y BERNAL
Personalmente “estoy con toda la disposición de aportar lo aprendido durante estos años, trabajando con distintos arqueros. Hay gente que ponía que solo estuve en León; se olvidan de América en la Concachampios, de Atlas. Ya tengo un buen recorrido aquí, lo mismo que en Ecuador y en otros países”.
Marcelo fue colaborador de Gustavo Matosas con los panzas verdes y a mediados del año pasado lo acompañó a su aventura a Arabia Saudita.
De abril a junio de este año estuvo preparándose en Italia. “Tomé un curso y en gran parte nos lo dio Claudio Filippi, el entrenador de arqueros de la Juventus y de Buffon. El haberlo tenido a él como maestro aumenta tu desarrollo profesional”, comenta.
Como jugador, Marcelo es de la época de Adolfo Rios, Jorge Campos, Sergio Bernal y Óscar Resano. “Yo estaba en la reserva cuando el equipo jugó la final 1990-91 ante el América”. Fue preseleccionado por Ecuador en 1995 por tener doble nacionalidad.
“David Patiño me invitó a Pumas. Es un orgullo muy grande regresar a Pumas, estar de vuelta en casa. En este equipo debuté en Primera División, pero en el torneo de Copa. Para mí es una sensación muy especial estar vistiendo otra vez los colores”.
Le da gusto que Pumas haya crecido tanto en los últimos años. “Siempre ha sido de los grandes y su infraestructura es de primer mundo; está para competirle a cualquier equipo. Es increíble”.
Regresar a @PumasMX que me brindó la oportunidad de debutar profesionalmente implica una gran emoción y mucho compromiso!Estoy seguro que se cumplirán los objetivos que nos hemos propuesto Directivos, Cuerpo Técnico y Jugadores, con el respaldo de esta gran afición! #SoyDePumas pic.twitter.com/aP8BFSRU0C
— Marcello Capirossi (@mcapi25) 12 de diciembre de 2017