Para Hernán Cristante la rivalidad que existe entre Toluca y Santos tiene ingredientes para ser considerado como “Clásico”, más allá de las dos finales que han disputado. Argumenta que los estilos de juego de ambos equipos hacen que los enfrentamientos entre Diablos y Guerreros sean intensos.
“Aumenta la incertidumbre, la adrenalina, porque si llegara a ser un clásico, son dos equipos que le quieren ganar al otro, no son dos equipos que, (dicen) 'bueno vamos a manejar el partido, le faltan el respeto un poquito, no. Son dos equipos que se respetan demasiado y al contrario de lo que se piensa de querer faltarle al respeto al rival, los equipos que se respetan dan más en la cancha de lo que tienen y hablo del corazón, hablo de la intensidad”, declaró el director técnico para ESPN.
Será la cuarta ocasión que Siboldi y Cristante se midan desde los banquillos de la Liga Bancomer, los del Estado de México tienen dos triunfos por uno de los de Torreón, sin embargo, para Hernán eso no cuenta: “Hoy no juega ni el pasado reciente de estos partidos, no juega la historia, no juega absolutamente nada. En este partido juegan las ilusiones de dos equipos que han trabajado bien”.
Cristante recordó la final que disputaron ambos equipos en el Bicentenario 2010, torneo que califica como el mejor de su carrera a pesar que las lesiones le impidieron tener minutos de juego: “Si bien no podía estar entrenando con el plantel, mis facultades físicas no daban, pero hubo algo que me hizo muy fuerte y muy sólido con el equipo, que fue el vínculo que tenía. Recuerdo todos los miércoles la parrilla en casa se prendía. Convivíamos y eso lo hizo fuerte al grupo”.