MÉXICO --
Para el torneo Clausura, la directiva del cuadro azulcrema en conjunto con las autoridades acordaron que podían llegar en su autobús oficial a Ciudad Universitaria, pues confiaban plenamente en el dispositivo de seguridad y el mismo respeto de los aficionados rivales para hacerlo, situación que no generó ningún problema en dicha ocasión.
Para este juego, sin embargo, cambió la medida y a pesar de que no viajaron en camionetas blindadas como en el pasado, sí lo hicieron en un autobús alternativo y sin logos del club o algo alusivo al mismo, mientras que la unidad oficial del equipo se quedó en el hotel de concentración.
La llegada de los azulcrema al Olímpico Universitario provocó una intensa movilización entre los elementos de seguridad de la zona, ya que a la llegada se integraron camiones antimontines con el objetivo de evitar inconvenientes con la porra visitante.
El operativo con más de 20 unidades de camiones y motociclistas de la Secretaría de Seguridad Pública causó impacto entre los propios futbolistas, pues tenían sus cortinas abiertas para observar lo que ocurría en la zona.
El tiempo de llegada al inmueble fue de aproximadamente 20 minutos desde su hotel de concentración, sin contratiempos.