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El pragmático Martino dejó atrás al rebuscado Osorio

Imago7

En la Selección Mexicana de Gerardo Martino abunda el pragmatismo. El argentino no es demasiado teórico ni gusta de hablar de conceptos complejos para explicar lo que busca en el equipo, su manera de entrenar, sus ideas o cómo concibe el futbol y lo que espera de los jugadores mexicanos que ahora dirige.

Martino tiene su toque de gracia cuando lo cree oportuno. Entiende y reconoce que en sus primeros 40 días de gestión al frente del Tri vive en una luna de miel y lo aprovecha cabalmente. Después, asume que llegarán las críticas por algún resultado, estilo de juego, si utiliza o no a tal o cual jugador o incluso si convoca a uno y a otro no. Sabe controlar ese tipo de escenarios.

Es por eso que en la actualidad de una vez por todas pone sus cartas sobre la mesa en todos los aspectos. No se anda con rodeos y es específico en sus conceptos o en lo que quiere dar a entender cuando se trata de temas de futbol y de otros en general.

“Entrenamos diferentes formas de salidas defensivas con la idea de ser un equipo que siempre elabore su juego con la salida del arquero”, resumió, en relación a lo que busca en el Tri y que practicó en estos tres días de trabajo.

“Estamos casi todos como en una luna de miel, es todo positivo, los pelotazos vendrán dentro de poco”, reconoció, acerca de sus primeros días al frente del Tri.

“Generalmente los entrenamientos son a puerta cerrada porque hay dinámica o roces y si se produce uno, se intercambiarán opiniones de eso y no de lo que se hizo el entrenamiento. No sé a cuántos periodistas les interesan los temas tácticos y cuántos les interesa lo otro”, compartió, en referencia del por qué desde sus primeros entrenamientos refleja que serán a puerta cerrada bajo su gestión.

“Puede haber jugadores que sean convocados y no estén jugando, pero normalmente vendrán los que estén jugando y otros los que tengan probada su rendimiento en la Selección”, explicó, acerca del tipo de futbolista que considerará para el Tri.

Martino no deja cabos sueltos en ningún tema. No es alguien a quien le encante comparecer ante los medios, pero cuando lo hace, sale bien librado o al menos lo ha hecho hasta el momento.

El nuevo estratega del Tri comienza a marcar sus tendencias a seguir y su manera de trabajo. En el pasado quedaron los conceptos meticulosos y sumamente estudiados de Juan Carlos Osorio para darle entrada a un entrenador que disfruta de su luna de miel en México, a la espera de saltar al ruedo y esquivar los primeros dardos hacia su trabajo.