NUEVA YORK -- De regreso a la riendas de la selección nacional de Estados Unidos por primera vez en una década, el técnico Bruce Arena dijo que "estamos peleando por nuestras vidas".
Arena fue contratado la semana pasada para remplazar a Jurgen Klinsmann como técnico luego de derrotas en casa ante México y como visitante ante Costa Rica en los dos primeros partidos de la ronda final de las eliminatorias mundialistas de Concacaf.
En una sesión de una hora con reporteros el martes, Arena dijo: "Nuestra zaga jugó mal, y no pienso que ellos son malos jugadores". Su objetivo es "colocar al jugador adecuado en la posición adecuada y que jueguen mejor como unidad".
Arena agregó que los aficionados del equipo estadounidense no deben esperar muchos cambios en la plantilla, al menos no de manera inmediata, pues aseguró que tiene contemplado a un grupo de "entre 50 y 60 jugadores", pero eso no implica que haga modificaciones severas para las siguientes dos jornadas de la eliminatoria mundialista de marzo y junio.
"Conozco a todos los jugadores, conozco las opciones. No creo que vaya a haber muchas sorpresas en la rotación de jugadores que tengo en este punto.
"Podría haber cambios en el verano cuando estemos en la Copa Oro cuando podemos integrar a más jugadores, pero en marzo y junio debemos tener jugadores más establecidos en el ámbito internacional. No vamos a experimentar en esos partidos".
Arena tiene buenas razones para ser conservador con su elección de jugadores en los siguientes juegos de eliminatoria, en los que visitará a Honduras y Panamá en marzo, antes de recibir a Trinidad y Tobago y jugar contra México en junio. Arena cree que llamar a jugadores con una corta experiencia internacional podría ser costoso.
El ex técnico del Galaxy, que dirigió a la selección de Estados Unidos de 1998 a 2006, tampoco tendrá disponibles a los jugadores que militan en Europa y México hasta que se acerque la fecha de eliminatorias el 24 de marzo. Sólo tendrá algunos días de entrenamiento con su grupo de jugadores para preparar el partido ante Honduras, lo que, asegura, reviste más importancia a su concentración planeada para enero, en la que usualmente se convocan a los jugadores de la MLS.
"Aún hay muchos viajes, mucha actividad y queremos tener una opción de observar a otros jugadores. El campamento de enero va a ayudar en un par de aspectos. Se identificarán a los jugadores que creemos que pueden integrarse y también acelerar su adaptación y condición para el juego. Así que mientras ellos llegan a marzo con actividad en sus clubes, para el día 24 esos jugadores estarán cerca de su mejor forma, lo cual necesitamos. Es importante".
Arena dijo que su roster completo es capaz de jugar en el campamento de enero, pero no todos tendrán la calidad de llegar a la lista final para las eliminatorias de marzo.
"Tenemos un grupo en mente justo ahora de entre 50 y 60 jugadores. Todos ellos pueden jugar en enero y febrero, pero no pueden en marzo. Tengo suficiente experiencia para entenderlo ahora y espero que podamos conseguirlo".
Con información de AP y mlssoccer