LOS ÁNGELES -- El delantero estrella del LA Galaxy, Zlatan Ibrahimovic, regresó de la suspensión en gran forma, pero ni siquiera el par de goles que consiguió impidió la derrota por 3-2 frente al FC Dallas.
“Obviamente quieres ganar, para eso entrenamos, es un juego colectivo. No quiero culpar a nadie, siempre me culpo si no estamos ganando”, dijo el sueco después de anotar los dos tantos agonizantes que no le alcanzaron al once de Sigi Schmid para salir del abismo táctico que padecen.
“Soy el que tengo que hacer mucho más de lo que estoy dando, así que continuaré trabajando duro”, comentó el astro sueco que se llevó las manos al rostro durante el juego frente a Dallas, en señal de inconformidad y frustración.
“Yo trato de ayudar en cada situación, estoy aquí para eso, no siempre se da al 100% pero tratas y tratas; con la experiencia que tengo a veces funciona, a veces no, lo importante es no rendirse y seguir intentando”, aseguró.
La alineación 4-2-3, sacudida además por la ausencia de Jonathan dos Santos, reemplazado por Sebastian Lletget en el ataque de medio campo, tomará tiempo en acomodarse, mientras él y eventualmente su hermano Gio estén en Rusia.
"Es muy frustrante para el grupo, estábamos ganando dos partidos seguidos y queríamos el tercero, pero perdiendo los dos hermanos, por supuesto es difícil al no tener jugadores tan importantes en el equipo”, comentó Lletget en los camerinos del Stub Hub donde el ambiente es de profunda zozobra.
En el minuto 13 Romain Alessandrini tuvo la única llegada clara a la zona de peligro para los locales en el primer tiempo, pero luego vendrían los goles de los rojos en las piernas de Ryan Hollingshead al 33, y del paraguayo Cristian Colmán al 40 , y la mesa quedó servida.
“Creo que todo el equipo está frustrado con lo que se hizo hoy; nuestro saque tiene que mejorar , nuestro cruce es muy inconsistente”, dijo el DT Schmid reconociendo que con respecto a los cambios en la alineación “lo primero que tengo que ver es si yo tomé las decisiones adecuadas”, enfatizó.
Más allá del regreso de Ibra, quien vio su primera tarjeta roja en Montreal tras agredir al lateral izquierdo Michael Petrasso, el equipo tiene cuentas pendientes con su afición. Con su dos goles, en el 69 y el 97, Zlatan terminó concretando el descuento, pero le hace falta un norte a la escuadra entera, para enamorar de nuevo a la exigente tribuna.
El cuadro local, que mostró una defensa floja en la segunda mitad, recibió el tercer balazo en las piernas del ecuatoriano Carlos Gruezo quien cerró con broche de oro la visita del once del estratega colombiano Oscar Pareja volviendo a sacar la casta, ostentando 23 puntos y el meritorio segundo lugar de la tabla oeste, muy por encima del Galaxy que con 16 continua en las catacumbas, en el octavo escalón.