Antes de aquel encuentro de la Copa América Centenario, Rafael Márquez hizo un viaje relámpago a México para el nacimiento de su hijo Leonardo y justo un día antes del cotejo frente a Chile volvió a la concentración, pero Juan Carlos Osorio no lo consideró para estar en el campo. El capitán expresó que de haber sabido que hubiera jugado, habría sacrificado viajar a Guadalajara para jugar con el Tri.
"Son decisiones de él, yo las respeto, él las toma y uno tiene que respetarlas. Si me hubiera dicho que es muy importante que estuviera o que me va a necesitar para el partido, intento no venir al nacimiento de mi hijo y como digo, la familia es muy importante, pero también el trabajo. Lo hubiera entendido de igual manera", expuso, en entrevista con John Sutcliffe de ESPN..
Con 19 años de experiencia en la Selección Mexicana, Márquez entiende que al futbol mexicano le hace falta dar un salto para cambiar su destino, algo que no se ha logrado por un problema cultural en general.
"Es parte de la cultura del jugador mexicano, porque no es un problema de hace cuatro o dos años. Si vemos en la historia, nadie ha hecho lo que nosotros, nadie ha superado a lo que hemos llegado. Hablo de los que se encuentran del otro lado haciendo las críticas y al final nadie ha hecho más para cambiar la historia. Sí es un problema de cultura, mental, que te das cuenta cuando estás en el exterior, que la mentalidad alemana, la misma española, la italiana es totalmente distinta a la mexicana, a la manera de trabajar, de ver las cosas", señaló.