MADRID -- Raúl mira a casa en su 40 cumpleaños. El mito madrileño, nacido el 27 de junio de 1977, vive sus últimos días de relativa calma. En menos de una semana, el aún dueño del récord de mayor número de partidos disputados con la camiseta del Real Madrid (741), será presentado como nuevo fichaje; esta vez para incorporarse al organigrama del club.
El segundo máximo goleador en la historia del club con 323 tantos ya avisó en la víspera de la final de Champions League disputada en Cardiff, donde el Real Madrid conquistó la ‘duodécima’ tras vencer por 4-1 a la Juventus, que a partir del 1 de julio asumirá su nuevo cargo en el Real Madrid.
Un puesto, según comentó a una radiodifusora española, "cercano al Director General del club", José Ángel Sánchez, una de las voces cantantes en las decisiones administrativas del club, y sobre todo, en la planeación deportiva.
No especificó en qué capacidad colaborará "cerca" del segundo hombre más poderoso del club o el tipo de decisiones que, a partir de ahora, correrán por su cuenta. Se ha especulado con un regreso parecido al de Zinedine Zidane, que antes de iniciar su preparación como entrenador fue asesor de Florentino Pérez, un puesto en la cantera, o con un cargo en la actualmente vacante dirección deportiva. Se ha especulado, sobre todo, con el inicio de su preparación como entrenador.
Florentino Pérez ha ido incorporando exjugadores en prácticamente todas las áreas del club, el cuerpo técnico del primer equipo, el aparato mediático y propagandístico, hasta algún cargo -- más cercano a lo decorativo que a lo operativo -- en la directiva. Y se ha mostrado particularmente interesado en reclutar exjugadores para futbol base.
Es por eso que la mayoría de puestos en ‘La Fábrica’ están ocupados por gente de casa. La cantera, contrario a la creencia popular, es de gran importancia para el Real Madrid, uno de los principales ‘exportadores’ de talento en España.
Además, la incorporación de figuras del pasado reciente respetadas, hasta queridas entre la masa social merengue, da una imagen de unión al exterior y refuerza ese vínculo emocional de los aficionados con el club. Alfredo Di Stéfano, predecesor de Raúl como ídolo del madridismo, fue ‘Presidente de Honor’ hasta el día de su muerte.
Lo ha sucedido en el cargo otro histórico de la era dorada del club, Paco Gento. Emilio Butragueño cumple con sus funciones publirrelacionista y de embajador de la marca merengue como Director de Relaciones Institucionales. Roberto Carlos entretiene al modesto público de la televisora institucional, mientras Solari y Guti encabezan a la legión de exjugadores encargados de formar a las futuras estrellas como entrenadores en la cantera.
Luego está la gran estrella, Zinedine Zidane. Ayer ‘héroe’ de la novena y hoy aspirante técnico de leyenda con los blancos.
El nombramiento de Raúl tiene aún mayor carga emocional. Por su importancia en la historia del club, lo reciente de su marcha y, sobre todo, la manera en que se llevó a cabo. El propio Raúl reconoció, en una entrevista reciente con Panenka, que su salida del club en el verano de 2010 “no ha sido la mejor”. Tras 16 temporadas vistiendo la camiseta blanca desde su debut en 1994, el atacante español se vio obligado a buscarse otro destino a los 33 años de edad. El entonces nuevo entrenador, José Mourinho, le había dejado bien claro que no contaba con él como posible titular.
Su salida se orquestó rápidamente y en poco tiempo a principios de julio.
“Volveré”, dijo entonces.
Tras abandonar el Bernabéu pasó por el Schalke 04 donde pasaría las siguientes dos temporadas. Llegó a 40 tantos en los 98 partidos que disputó con el conjunto alemán, algo que le alcanzó para proclamarse incluso máximo goleador de la Champions League con 71 goles - si bien el gusto le duró apenas dos años hasta verse superado por Lionel Messi, primero, y Cristiano Ronaldo, después. Cerró su carrera en 2015 con el NY Cosmos tras una corta temporada en el Al-Saad de Qatar, equipo con el que volvió al Bernabéu en 2012 para disputar un amistoso a modo de despedida tardía.