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No ha habido una versión oficial por la cual Héctor Herrera, de 28 años, dejó la concentración de la Selección Mexicana el miércoles con lo que se perdió el entrenamiento de ese día. La Federación Mexicana publicó un comunicado diciendo únicamente que tuvo un “permiso especial” del cuerpo técnico y de la directiva. De acuerdo a algunos reportes, la fiesta en el día libre a la que acudieron algunos de los jugadores de la Selección el sábado pasado en la Ciudad de México, probablemente causó fricciones maritales, aunque de parte de los jugadores o de la propia Federación no se ha dado alguna opinión acerca del tema. Lo que sí sabemos es que Herrera regresó a los entrenamientos el jueves y trabajó de manera normal e incluso se le vio relajado. Ahora, el entrenador de la Selección Mexicana, Juan Carlos Osorio, estará desesperado para que Herrera se mantenga bajo una misma línea y esté enteramente concentrado en el Mundial, con el debut de México ante Alemania el próximo 17 de junio. La preparación de México para el Mundial no ha sido la mejor hasta el momento. La situación de las lesiones con Néstor Araujo fuera, y con Diego Reyes, Andrés Guardado y Héctor Moreno todos con dudas, parece ir mejorando con los tres ya en la práctica del equipo este jueves. Pero lo último que Osorio puede permitirse es que la mente de Herrera divague y sufra las consecuencias de esa fiesta. En un equipo en el cual el trabajo colectivo es el fuerte para ser exitoso en Rusia, Herrera es probablemente una de las figuras claves, el hombre fuerte del mediocampo, pues su trabajo es más importante en el equipo que el de cualquier otro jugador. Herrera llega a este torneo en el momento cumbre de su carrera. Fue quien comandó al Porto en el título de la Liga portuguesa, anotando un importante gol sobre la hora para asegurar el triunfo en contra del Benfica en el Estadio da Luz el pasado 15 de abril. Fue un gol que quedará enmarcado en el equipo. Con el equipo nacional, Herrera, quien detesta ser relegado a la banca, comenzó los dos partidos del Tri frente a Gales y Escocia, que fueron los más recientes del equipo antes del Mundial, y mostró que está en forma de cara a Rusia 2018. Siempre se mostró para recibir el balón, presionó, distribuyó e hiló las jugadas. Las estadísticas resumen la importancia que tiene la labor de Herrera en el equipo. Durante las eliminatorias para el Mundial, la Copa América y la Copa Confederaciones, con partidos con una importancia especial, Herrera ha jugado más que cualquier otro jugador en la era de Juan Carlos Osorio. Incluso, ha creado más opciones de gol, ha tenido más contacto de balón y ha dado más asistencias que cualquier otro futbolista. “Es un jugador que cualquier entrenador desearía tener por su habilidad para jugar en cualquier zona del campo”, dijo Marcelo Bielsa acerca de Herrera al inicio de esta semana en Cancún, en el Régimen de Transferencias del futbol mexicano. Herrera es el punto de apoyo del equipo mexicano y por eso no sorprende que esté ligado con un movimiento a la Roma. Con su contrato con el Porto finalizando en 2019, los semifinalistas de la pasada Liga de Campeones difícilmente serán el único equipo interesado en sus servicios este verano. En Rusia existe el debate sobre dónde jugará Herrera en su selección nacional, con Osorio un tanto inseguro sobre dónde lo pondrá, pues puede jugar como medio de contención o unos metros más adelante para que genere jugadas y tenga un rol más ofensivo. La emergencia de Miguel Layún como mediocampista y la omisión de Jesús Molina en la lista de 23 jugadores, sugiere que Herrera jugará más como un medio de contención. Lo único que no deja ninguna duda es lo importante que es Herrera para México.
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