MÉXICO -- Sábado, 18 de junio de 2016. Es un día que no queda en el olvido para los seleccionados mexicanos. Fue la fecha en la que vivieron su peor derrota tras sucumbir, 0-7, frente a Chile. Ya son dos años de aquella jornada y la actualidad, después de todo, marca que, en ese lapso de tiempo, el Tri se clasificó al Mundial, consiguió triunfos importantes a domicilio y hasta derrotó al vigente campeón del mundo en su debut en Rusia 2018.
“Los primeros en sufrir cuando nos ganan somos nosotros. Nadie se acuerda del 7-0, pero nosotros sí, no hay que olvidarse de esa situación, de todo lo que hemos sufrido y pasado ha servido como experiencia para cosas como hoy (ayer)”, se atrevió a recordar el portero Guillermo Ochoa, luego de vencer a Alemania en la jornada inaugural para el Tri en el Mundial de Rusia.
El combinado mexicano dio un giro de 180 grados en dos años. Aquel 18 de junio de 2016, tras perder contra Chile, predominaron las disculpas y la vergüenza por lo acontecido en Santa Clara en la Copa América Centenario.
"Disculpas, estamos muy avergonzados, en verdad nos duele en el alma”, reconoció aquel día Javier Hernández.
"Esta derrota nos deja en el suelo. Yo creo que nadie de los que estamos en Selección había vivido una derrota como esta y ahora toca tragarse todo lo que se tenga que tragar uno como futbolista”, se apresuró a lamentar Héctor Moreno al salir de dicho cotejo.
En el Tri no daban crédito a lo ocurrido. Los jugadores se asumían como los principales responsables y si pedían algo eso era confianza hacia Juan Carlos Osorio. A pesar de llevar menos de un año con el colombiano al frente, estaban convencidos de sus ideas y de que sería el entrenador que los podía guiar a un siguiente nivel.
"Nosotros como principales actores, sí pediríamos ese voto de confianza porque nos convenció de muchas cosas y no hay más que darle todo el apoyo", aseveró el capitán Rafael Márquez tras esa noche en Santa Clara.
En la Federación Mexicana de Futbol se abrió el debate, pero al final la apuesta por la continuidad de Osorio prevaleció. Cambios hubo algunos como llevar a Imanol Ibarrondo, quien a partir de ese momento se incluyó como coach del Tri para trabajar en la confianza y la unidad del equipo en general.
Su labor no fue sencilla. Comenzó con trabajos en equipo y luego los individualizó. Lo mismo ocurrió con jugadores y cuerpo técnico, quienes, a su vez, se encomendaron a dar vuelta a la situación, levantarse, conseguir el pase al Mundial y escribir una historia distinta a las que se han escrito en el pasado. Osorio introdujo un concepto que continuamente utiliza como la “resiliencia”, que consiste en el resurgimiento ante las condiciones adversas.
“Encontré un México dolido y descubrí cómo se vive el futbol aquí y el futbol es como la vida porque ustedes los mexicanos tienen una pasión desbordante. Para el equipo, el 0-7 fue durísimo, tanto para los que participaron como para todos, para todo el país, pero no estaban rendidos ni mentalmente débiles. De hecho, justo después fueron a Estados Unidos, donde ganaron después de mucho. Ahí demuestran que tienen una mentalidad muy fuerte”, destacó Imanol Ibarrondo hace unos días en su primer encuentro frente a los medios de comunicación, ocurrido en Los Ángeles antes de medirse a Gales en partido de preparación.
El Tri, después de esa dolorosa derrota frente a Chile, ganó en campos hostiles como en Columbus contra Estados Unidos; visitó Puerto España y derrotó a Trinidad y Tobago, donde no ganaba desde hace más de tres lustros; empató frente a Portugal, campeón de Europa, en la Copa Confederaciones y hasta venció a Rusia en su propio país en ese mismo certamen. El cambio, poco a poco, mostró sus primeras luces.
La goleada frente a Chile fue de mero aprendizaje y hasta el propio Osorio agradeció que le pasara para saber cómo encarar ese tipo de situaciones cuando un cotejo se pusiera cuesta arriba como ocurrió el de aquella tarde en Santa Clara.
“Estoy agradecido de que eso haya pasado (el 0-7) porque aprendí mucho. No sé si la próxima vez que suceda seremos capaces de revertir el resultado, pero estaremos preparados para detener el daño, y eso es un extra en mi carrera, porque era algo que aprendí y que no esperaba aprender, pero sucedió, y es parte de la vida. Aún creo que el beneficio de ese catastrófico resultado fue el aprendizaje”, indicó el seleccionador hace unos meses.
Justo dos años después de aquella goleada, el combinado mexicano revirtió por completo su realidad. De aquel trago amargo en Santa Clara ahora festeja en Moscú, tras derrotar a Alemania, la vigente campeona del mundo.
“Realmente creo que nos lo merecemos porque hemos sufrido de todo. Al profe (Osorio) se le ha criticado por todos lados, no se creía en esta Selección o no se cree, y espero que con este triunfo alguno que no confiaba mucho, piense que nos debe dar ese voto de confianza y creer que realmente podemos conseguir cosas importantes”, aseveró este domingo Andrés Guardado en medio de las celebraciones por la victoria obtenida.
El Tri cabalga con paso firme en Rusia. Si antes de que comenzara el Mundial fueron muchas las voces que pidieron la salida de Osorio, la continuidad y confianza en el proceso dieron su primer fruto, pero los jugadores esperan que no sea el único.
“Lo primero que tiene este equipo siempre fue la ilusión, creerlo nosotros primero, pero en el equipo mexicano sabíamos que teníamos calidad, talento, temple, hemos mostrado mucha personalidad y eso lo vio la afición mexicana”, destacó Ochoa, quien sueña despierto al igual que sus 22 compañeros en el Tri.