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Cómo resolver la crisis albiceleste

FIFA via Getty Images

La selección argentina sigue con vida en este Mundial luego de dos partidos con desempeño mediocre. Sin embargo, sus oportunidades de sobrevivir a la fase de grupos se encuentran en terapia intensiva y el ambiente que rodea al equipo hace sentir como si algunos de sus jugadores también. ¿Pueden cambiar esta situación gris? E independientemente de si lo pueden hacer o no durante este Mundial, ¿qué pasos pueden dar después a fin de recuperarse?

A corto plazo

Sacar a Willy Caballero de su desgracia

Durante años, muchos han dicho que Sergio Romero no podía hacer el trabajo con la selección de su país sin ser jugador regular en su club. Durante años, él demostró que estaban equivocados. Sin embargo, el pobre desempeño de Caballero este año en compromisos amistosos y durante el Mundial han demostrado lo complicado de la hazaña de Romero, pasando de ser actor secundario en su club a protagonista en el escenario internacional mientras éste lo hacía ver sencillo.

Con Romero lesionado, Argentina no puede darse el lujo de tener más problemas en el arco. Si bien los otros guardametas del conjunto son noveles en el plano internacional, ambos han jugado mucho mejor y de forma más constante en sus respectivos clubes esta campaña.

Franco Armani, de River Plate, es la opción más obvia. Nahuel Guzmán, de Tigres en la Liga MX no sería mala idea. Sin embargo, el clamor mediático por Armani en Argentina ha sido tal que, si Guzmán ingresa y comete un error, Sampaoli sería crucificado. Si Armani llega a pecar, el técnico podría, por lo menos, afirmar que les dio oportunidad a sus críticos de tener lo que ellos quieren y no funcionó. De todos modos, un error que signifique la derrota sería menos probable con alguno de ellos presente que con Caballero en estos momentos.

Mover el balón desde el mediocampo hacia la delantera

Contra Nigeria, Lionel Messi necesita recibir el balón más que ante Croacia y además debe subirla más hacia el arco contrario. A fin de hacerlo, debe contar a su lado con un buen pasador desde el mediocampo. Hasta Banega puede ser inconsistente para Argentina hasta rayar en lo frustrante. Sin embargo, su inclusión podría ser una manifestación de intenciones. Por su parte, Giovani Lo Celso es una alternativa decente.

Conseguir un sistema para los jugadores

Sampaoli ha utilizado 13 alineaciones titulares distintas y, al parecer, una cantidad similar de sistemas en 13 partidos a su cargo. Hasta ahora, en Rusia se ha mostrado como si quisiera reinventar la rueda. Obviamente que pedirle al técnico que consiga el sistema apropiado para los jugadores con quienes cuenta, en vez de tratar de adaptar a éstos a sus ideas, no es demasiado pedir.

A mediano y largo plazo

A los propósitos de este ejercicio, asumimos que Sampaoli permanece en su puesto luego de concluida la intervención albiceleste en Rusia 2018, sin importar que esto ocurra este martes o en la final del 15 de julio.

Planificarse para la era post-Messi

Nos guste o no, esto va a ocurrir. Casi con toda certeza, se puede afirmar que este es el último Mundial de Messi, además de que el tormento emocional hasta ahora ha sido evidente en “La Pulga”. Por ello, su retiro internacional en las próximas semanas no sorprendería a nadie. Si Sampaoli no puede persuadir a Messi de permanecer para otro ciclo mundialista, se requiere ejecutar un claro plan de sucesión.

Esto podría implicar el darle, finalmente, a Paulo Dybala (quien parece ser más apropiado para reemplazar a Messi en caso de lesiones o suspensiones en vez de jugar a su lado) libertad dentro de la cancha y ciertamente significa hacer de la creación una labor más colectiva.

Fijarse objetivos para la próxima Copa América

Una de las mayores dificultades que siempre se menciona en el concierto del fútbol internacional, en comparación con el de clubes, es la ausencia de oportunidades inmediatas de redimirse tras una mal resultado o un torneo mediocre. No obstante, luego del Mundial se producirá otro torneo internacional en apenas 12 meses. La Copa América 2019, a celebrarse en Brasil, ofrece una posibilidad muy rápida dentro del contexto de selecciones.

Volver a lo básico

De cierta forma, los orígenes de los problemas experimentados por Argentina en los últimos dos años pueden conseguirse en la partida de José Pékerman como técnico en 2006. Desde su partida junto con la de Hugo Tocalli, el sistema de canteras argentino, antes espectacular, ha experimentado una fuerte sequía bajo el mando de Humberto Grondona, hijo de Julio, ex presidente de la AFA. Ahora, con Sebastián Beccacece, asistente de Sampaoli, a cargo de la selección sub-20 y Pablo Aimar supervisando categorías menores, hay mayor grado de supervisión.

Sin embargo, hay talento joven en ciernes: Lautaro Martínez, delantero de Racing, ha tenido una buena temporada y quedó fuera de la convocatoria mundialista por muy poco margen, mientras que Santiago Ascacibar, juvenil del Estudiantes de La Plata, hizo 29 apariciones en el corazón del mediocampo con el Stuttgart de la Bundesliga en su primer año en el extranjero durante la pasada campaña, habiendo cumplido 21 años hace pocos meses.