La Copa del Mundo ha llegado a las semifinales y es un evento europeo, con Francia frente a Bélgica, seguido de Croacia contra Inglaterra.
Antes de los partidos, aquí hay una pregunta clave que cada equipo debe responder.
Francia: ¿Podrá Giroud jugar con Griezmann y Mbappé?
Francia ha llegado a semifinales superando a Argentina y Uruguay, pero todavía se siente como si no hubieran hecho clic completo. Kylian Mbappé ha tenido una sorprendente actuación contra Argentina, quizás la mejor exhibición individual de toda la competencia, mientras que Antoine Griezmann ha proporcionado momentos decisivos sin realmente jugar bien. ¿Tienen los Blues un engranaje extra?
Mbappé y Griezmann son claramente sus atacantes más peligrosos, pero quizás el hombre clave es Olivier Giroud. Jugando por adelantado y, como siempre, de espaldas al objetivo, es esencialmente un señuelo permanente y un asistente, en lugar de un anotador de goles. Sus movimientos han funcionado, especialmente como sustituto contra Australia, pero ha sido menos impresionante en los últimos partidos, aunque ayudó al segundo de Mbappé contra Argentina después de una preciosa jugada colectiva.
Contra Bélgica, Giroud se enfrentará a oponentes familiares: Toby Alderweireld del Tottenham, Vincent Kompany del Manchester City y, posiblemente, a Thomas Vermaelen del Arsenal. Giroud no puede derrotar a esos defensores en términos de velocidad, pero sus compañeros pueden. Como tal, su enfoque será relativamente sencillo: colóquese frente a un defensor, sacarlos de su línea defensiva y cree espacio para Griezmann y Mbappé.
Kompany, cuyo posicionamiento era un tanto incierto contra Brasil, es particularmente propenso a involucrarse en enfrentamientos físicos y dejar espacio atrás, lo que significa que el duelo entre Giroud y Kompany podría ser la batalla individual clave del juego.
Bélgica: ¿Qué sistema usa Martínez?
Después de haber usado una formación 3-4-3 en los cuatro primeros partidos de la Copa Mundial de Bélgica, Roberto Martínez cambió sorpresivamente a un diamante en el centro del campo, o un 4-3-3 con Kevin De Bruyne como falso nueve, para la victoria por 2-1 en los cuartos de final ante Brasil. El sistema, sin embargo, no fue un éxito completo: Bélgica concedió muchas oportunidades, con la naturaleza flexible de su defensa a veces dividida.
Martínez enfrenta un dilema de formación antes de la semifinal, complicado porque su único lateral derecho, Thomas Meunier, fue descartado por suspensión. Con opciones de ataque como Nacer Chadli y Yannick Ferreira-Carrasco, las alternativas, y para enfrentar la velocidad del francés Kylian Mbappe, una defensa de tres hombres parece arriesgada.
Por lo tanto, es más probable que Martínez juegue cuatro en la parte posterior, con Jan Vertonghen como lateral izquierdo convencional. El entrenador puede atacar más en el lado opuesto, y solo debe preocuparse por el funcional Blaise Matuidi, jugador de corte defensivo. Como tal, Chadli podría ser utilizado en el lateral derecho, que sería su cuarta posición del torneo.
Marouane Fellaini comenzó contra Brasil y tuvo la tarea de empujar para apoyar a Meunier. Se le podría pedir que haga algo similar a la izquierda, para cerrar Mbappe. Axel Witsel jugará en la mitad del campo y Mousa Dembele podría entrar al lado con Chadli, que jugó centralmente contra Brasil, siendo utilizado en otros lugares. Eso dejaría a De Bruyne jugar de nuevo en los tres primeros, alejándose de Samuel Umtiti y Raphael Varane en la posición central. Eden Hazard estaría a la izquierda, mientras que Romelu Lukaku podría volver a jugar desde la derecha, contra Lucas Hernández. Con Martínez, sin embargo, a menudo tienes que esperar lo inesperado.
Inglaterra: ¿Pueden hacer frente al juego de posesión de Croacia?
Gareth Southgate ha mostrado poco interés en desviarse de su formación de 3-3-2-2, a pesar del peligro de que Jordan Henderson sea invadido en el centro del campo, con una excepción. En las etapas finales contra Colombia, el entrenador de Inglaterra convocó a Eric Dier para ayudar a proteger a la defensa, pero el movimiento coincidió con el hechizo más pobre del juego. Las cosas mejoraron después de que Henderson regresó al papel de suplente, por lo que hay una tentación mínima de perturbar el sistema al presentar a Dier frente a Croacia.
Esta es, sin embargo, una nueva prueba. Hasta ahora, Inglaterra ha evitado en gran medida a los oponentes que esperan superarlos en el mediocampo. Colombia se vio obstaculizada por la ausencia de James Rodríguez y en su lugar empacó la alineación con los centrocampistas y el partido de Bélgica fue esencialmente irrelevante ya que ambos desplegaron a la reserva.
Croacia, sin embargo, tiene talentosos mediocampistas que controlarán la posesión; en su empate 2-2 con Rusia, Luka Modric e Ivan Rakitic se extendieron a posiciones muy amplias. Es probable que el entrenador Zlatko Dalic cambie el formato de su equipo, optando por un 4-3-3 en lugar de un 4-4-2, pero, en todo caso, Modric y Rakitic tendrán más licencias para jugar.
Esto, presumiblemente, estirará el propio trío del mediocampo de Inglaterra y, si Dele Alli y Jesse Lingard necesitan jugar más ampliamente, existe el peligro de que Henderson quede expuesto al movimiento de Rebic e Ivan Perisic. Inglaterra no será del todo infeliz si Croacia domina la posesión, ya que deberían poder jugar en el contraataque.
Croacia: ¿Tienen suficiente velocidad?
Enfrentar a Inglaterra trae dos problemas principales. El primero es su sistema inusual. El segundo es el nivel de velocidad. Croacia debería ser lo suficientemente inteligente como para hacer frente a la primera preocupación, pero el último problema podría ser insoluble.
La principal amenaza es Raheem Sterling, quien dos veces aceleró detrás de la defensa contra Suecia, aunque una vez estaba en una posición de fuera de juego. Pero Croacia usa una línea defensiva más agresiva que Suecia y sus defensores podrían verse intimidados por el ritmo de Inglaterra.
Esto podría ser un problema particular si se excluye a Sime Vrsaljko, quien salió frente a Rusia, por lesión. El lateral derecho del Atlético de Madrid es, por lejos, el defensor más móvil de Croacia y ejerció una gran influencia en su juego contra la nación anfitriona. Sin él, es probable que Domagoj Vida se convirtiera en lateral derecho y Vedran Corluka se uniría a la central, junto a Dejan Lovren.
Corluka y Lovren tienen mucha experiencia, pero difícilmente podrían hacer la dupla central más rápida. La falta de ritmo de Corluka fue una preocupación; él simplemente no se siente cómodo volteándose y corriendo. Lovren, mientras tanto, luchó masivamente contra un Tottenham inspirado por Harry Kane en la derrota de Liverpool por 4-1 ante el Tottenham en Wembley en octubre pasado y fue sustituido después de media hora.
Croacia también ha jugado 120 minutos tanto en la ronda de 16 como en los cuartos de final, lo que significa que el cansancio será un problema importante en todo el equipo. Con Kane, Sterling, Jesse Lingard y Dele Alli amenazando con quedarse atrás y Henderson capaz de mandar pases aéreos, la principal ruta de Inglaterra hacia la meta parece prometedora.