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MENDOZA (Enviada especial) -- La Selección Argentina cerró 2018 con un triunfo 2-0 ante México y acumuló su séptima victoria en el año, en los 13 partidos que jugó. Las derrotas fueron 4 y los empates, 2. Si bien los números podrían sugerir que ha sido una temporada favorable, lo cierto es que en un año mundialista no puede hacerse a un lado la actuación en la Copa del Mundo para delinear un balance de 2018. En tierras rusas, Argentina superó con lo justo la fase de grupos: empató con Islandia, cayó ante Croacia y le ganó con dificultad a Nigeria. En los octavos de final no hizo pie ante Francia, la poderosa campeona del mundo de Griezmann y Mbappé, y se despidió del certamen. Aunque en retrospectiva se evidencie que Argentina perdió ante los dos finalistas de Rusia 2018 (Croacia y Francia), la decepción fue grande tras la eliminación porque la Selección llegaba como una de las favoritas por contar con Lionel Messi y otras figuras de gran rendimiento internacional. La chapa de candidato del equipo de Jorge Sampaoli se basaba más en mística que en certezas: las Eliminatorias habían sido duras y el nivel de juego demostrado había dejado una deslucida impresión. Al repasar los números de la Selección, se advierte que las victorias fueron en encuentros amistosos y ante rivales mayormente débiles: una Italia que no clasificó al Mundial, Haití, Nigeria, Guatemala, Irak y México. La Albiceleste no pudo con España, Croacia y Francia y tampoco logró ganarle a Brasil el Superclásico de Las Américas. El 2018 ha sido un año irregular, en el que Argentina perdió a Lionel Messi y en el que cambió la conducción de Jorge Sampaoli por la de Lionel Scaloni, un DT que pisó fuerte, con aires de renovación y buscando abrirle paso a jóvenes con proyección, posiblemente pensando en darles rodaje para iniciar el camino a Qatar 2022. El balance es malo, pero las expectativas son buenas. Scaloni propuso nuevas figuras para vestir la camiseta argentina, los exigió y todos respondieron. Así forzó un cambio de aire en la hostilidad del público que, extraña con locura a Lionel Messi, pero parece estar dispuesto a resignar a otros referentes y apoyar el recambio en pos de alimentar nuevas ilusiones.
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