Sufrieron, pero avanzaron

SAN PEDRO SULA (Notimex) -- En un encuentro

descendente, con deficiencias en todas las líneas y el infortunio de

un autogol, perdió la Selección Mexicana de fútbol ante su similar de

Honduras por 1-0, y ambas calificaron al Hexagonal del próximo año.

Sobre la cancha del Estadio Olímpico de esta ciudad, Ricardo

Osorio marcó autogol al minuto 51, Gerardo Torrado y Carlos Vela

salieron expulsados para plasmar la burda copia de un equipo de

jerarquía.

Con el resultado, el técnico sueco Sven-Göran Eriksson está en

la cuerda floja, con un pie fuera del puesto, lo cual se ratificará

en la reunión de dueños que se realizará en los próximos días.

Sin duda fue un extraordinario primer tiempo el desarrollado por

el Tricolor, que con Matías Vuoso, en el eje del ataque, Antonio

Naelson, Sinha, un poco atrás, Fernando Arce y Andrés Guardado, como

volantes por derecha e izquierda, presionaron a los de casa desde la

salida.

Y así se jugó más en terreno de los catrachos, quienes no

pudieron pasar todas las veces que quisieron el medio campo, porque

Pável Pardo y Gerardo Torrado, metido en la contención, tuvieron una

gran labor.

Pareció que los mexicanos fueron los de casa, porque jugaron

mejor, atacaron más y se adaptaron al mal estado de la cancha, que se

hizo más resbalosa por la lluvia que cayó hasta los primeros 40

minutos.

El Toro Vuoso, quien por primera vez saltó de titular en la

era de Eriksson, amenazó al minuto dos con jugada por izquierda y

disparo potente por abajo que controló con apuros el arquero Noel

Balladares.

Es cierto que los primeros minutos fueron de apremio para los

tricolores, ya que al minuto siete, en tiro a balón parado por

izquierda, ingresó sólo el defensa Hendry Thomas y remató de botín

derecho, pero para suerte de los mexicanos salió el esférico muy por

arriba del larguero.

Aunque los mexicanos empezaron a dominar, a tener posesión del

balón, a ganar los rebotes y a presionar a los de casa desde la

salida, no pudieron tener claridad en las jugadas, porque se

defendieron bien los hondureños.

El Principito Guardado fue quien más veces, aunque pocas,

explotó su habilidad por la banda izquierda y al minuto 32 mandó

centro que Arce y un defensa lucharon por la de gajos, cayeron y el

balón quedó ahí, Vuoso, ubicado cerca, se hizo del esférico, se abrió

tantito a la derecha y realizó potente disparo.

Fue un disparo para gol, pero el Toro vio como el esférico

salió por el primer poste y se diluyó la clara oportunidad del

Tricolor.

La presión externa y en especial para los hondureños llegó con

la noticia de que Jamaica abría el marcador al minuto 28 de su

partido jugado ante Canadá e igualaba en puntos a los catrachos, que

seguía en segundo lugar del Grupo Dos por mejor diferencia de goleo.

A Gerardo Torrado se le cortó la respiración al minuto 36,

cuando en centro por elevación por izquierda cabeceó para despejar,

pero vio como paulatinamente el balón bajó con dirección a su

portería y para su fortuna apenas cayó por fuera del larguero.

Para el segundo periodo volvió la fuerte lluvia, los hondureños

tardaron en salir del vestidor con la finalidad de que la parte

complementaria de los Reggae Boyz se emparejara, pero tardaron tanto

los centroamericanos, premeditadamente, que los caribeños arrancaron

primero.

Y en tiro de esquina por derecha, cobrado por Guardado, Matías

le ganó en el salto a su defensor e hizo sólido remate con la cabeza

y para su mala suerte vio como se estrelló el esférico en el

travesaño, al minuto 47.

El asedio llegó para Oswaldo Sánchez, quien al 49 rechazó

potente disparo a media altura que le envió Carlo Costly, quien en

segundo tiro de esquina, éste por derecha, peinó de cabeza para

enviar la de gajos al centro y Ricardo Osorio, en su intento de

despeje, envió la de gajos adentro de su portería.

El autogol desató la locura en la tribuna y en los jugadores,

pues le ganaban al más antagónico de sus rivales y al mismo tiempo

conseguían el boleto para el hexagonal de la Concacaf del próximo año

y al mismo tiempo recuperaron la confianza para ir al ataque.

Pero Danilo Turcios desaprovechó dar el tiro de gracia al

Tricolor al minuto 61, cuando en pase filtrado quedó solo ante el

arquero y el delantero optó por un disparo por arriba, pero suave, y

el portero se quedó con el esférico en dos tiempos.

Paulatinamente igualaron las acciones los mexicanos, pero les

costó trabajo y tarjetas amarillas en su ímpetu por hacerse del

encuentro, pero al mismo tiempo exhibieron esa falta de conjunción

para ser mejores.

Y le costó trabajo al Tricolor organizar una clara ofensiva al

minuto 77, con potente disparo de Nery Castillo que salió ligeramente

desviado del arco de Balladares.

Pero luego el equipo se derrumbó, los mexicanos se desesperaron

y se confundieron entre jugar bien y excederse en las jugadas

fuertes, pues Torrado recibió la tarjeta roja por falta sobre

Turcios, al 87.

Un minuto después, Carlos Vela se olvidó completamente del balón

y le dio tremenda patada por atrás a Ramón Núñez para recibir la roja

del árbitro guatemalteco Carlos Batres.

Con el silbatazo final se patentó la debacle del equipo mexicano

al mando de Eriksson, el cual fue contratado por la Federación

Mexicana de Futbol con el sueño de llegar a instancias mundialistas

jamás alcanzadas.

Batres amonestó a los locales Wilson Palacios (46), Carlo Costly

(86) y Amado Guevara (90) y por los visitantes a Fernando Arce (30),

Antonio Naelson (52), el capitán Rafael Márquez (59) y Gerardo

Torrado (78) y salió expulsado al 87, y Carlos Vela, con roja, al 88.