Quilmes se tomó revancha y le ganó a Temperley como local

QUILMES (Télam) -- Quilmes volvió al triunfo luego de tres derrotas consecutivas, la última sufrida precisamente la semana anterior en cancha de Temperley por 2 a 0, y venció al Celeste del Sur por el mismo marcador en el estadio Centenario para cerrar la duodécima fecha del torneo de primera división denominada 'de los clásicos'.

Dentro de un partido muy discreto Quilmes siempre mantuvo la iniciativa del juego durante el primer tiempo ante un Temperley que presionó en mitad de cancha y procuró salir rápida de contraataque

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Pero en una de las pocas ocasiones en que el visitante ensayó una presión alta se equivocó con los pies el arquero local Silvio Dulcich, le quitó el balón Ariel Cólzera y cedió para Marcos Figueroa, a quien se le escapó la pelota bajo el pie izquierdo cuando solamente tenía que empujarla al arco vacío.

Temperley dejó escapar esa gran oportunidad y sobre los 18 minutos llegó la gran ovación de la noche, ya que con ese número juega el capitán Rodrigo Braña, quien se adelantó a los rumores que circularon en las últimas horas respecto de una posibilidad de pasar a Boca Juniors a raíz de las lesiones de los volantes Xeneizes Andrés Cubas y Fernando Gago y anunció que se quedará "para jugar los últimos cuatro partidos del campeonato con Quilmes.

"Me anticipé y corté por lo sano porque escuché rumores de que Boca me podía venir a buscar, aunque la realidad es que nunca me llamaron. Pero quiero disfrutar de los cuatro partidos que me restan en Quilmes y después sí, en junio me iré definitivamente de la institución", contó el Chapu al término del cotejo.

Ante semejante muestra de fidelidad la parcialidad 'cervecera' no solamente lo cobijó con su aliento, sino que además colgó una bandera que rezaba "Gracias Chapu por tanto, perdón por tan poco", y para la despedida la hinchada quilmeña bajó un claro mensaje sobre la actualidad del club, ya que a los futbolistas todavía no les pagaron sus salarios en 2016, con un cántico contundente: "Borombombón, quedate Braña y que se vaya toda la comisión".

Y toda esta gratitud el ex Estudiantes de La Plata y Unión de Santa Fe que el pasado 7 de marzo cumplió 37 años la devolvió con su natural entrega en la mitad de la cancha, relevando a los volantes que se lanzaban al ataque para reivindicar la derrota por 2 a 0 sufrida la semana pasada justamente en Temperley.

Claro que el gol tardó más de un tiempo en llegar, hasta que segundos antes de los 10 minutos del período final el delantero cordobés ex Vélez Sarsfield Ezequiel Recaldani logró la apertura que justificaba esa superioridad, leve por cierto, pero superioridad al fin, que ejercía el conflictuado conjunto de Alfredo Grelak.

Pero a partir de esa conquista los locales cedieron parte del fangoso terreno de juego a Temperley y el 'Gasolero' fue con mucha vergüenza en pos de un empate que tampoco hubiera sonado descabellado a la hora de repartir los escasos méritos que se vieron en la fría noche quilmeña.

Pero como el Celeste no supo aprovechar su cuarto de hora, porque merodeó el arco local, es cierto, pero le faltó siempre el toque final, sobre el epílogo otro veterano de tantas batallas como Sebastián Romero (Chirola tiene 38 años, uno más que el Chapu) remató la faena clavándole a Temperley la banderilla del segundo gol que cerró el marcador.

Después llegaron los empujones, las bravuconadas de unos y otros y las consecuentes tarjetas rojas que el árbitro Ariel Penel les mostró a dos volantes, Lucas Pérez Godoy del local y Cristian Canuhé, de la visita.

Así se consumó en una semana la revancha de un Quilmes que venía de perder por primera vez en la máxima categoría del fútbol argentino y hoy revalidó su paternidad como local, ya que en tierra 'cervecera' Temperley no le gana desde hace 42 años. Además el local volvió al triunfo después de tres caídas consecutivas.