Chacarita volvió a la Primera División

Chacarita volvió a instalarse en el fútbol grande, a siete años de su última incursión en Primera División, y a falta de dos para el cincuentenario del máximo logro que consiguió en su historia: el Metropolitano de 1969.

Fue un último partido sufrido para Chacarita, que lo perdía ante Argentinos, el campeón, pero en Puerto Madryn, Brown no pudo quebrar a Boca Unidos y no logró llevar la definición a un partido de desempate.

Chacarita terminó a once puntos del campeón y dos por sobre Brown, gracias a un buen funcionamiento del equipo que dirigió Walter Gastón Coyete, con una línea de juego definida y en el que tuvo gran protagonismo Nicolás Oroz.

Ese volante enganche fue el gestor de juego del equipo y cuando el se perdió en la nebulosa, Chacarita perdió rendimiento. Oroz jugó dos años a préstamo y ahora ya no le quedará más tiempo con la Tricolor, ya que Diego Cocca, el entrenador de Racing, lo pidió para integrar el plantel albiceleste.

"Cocca lo quiere para ser titular", dijo a poco de abrirse el libro de pases el vicepresidente de Racing Miguel Jiménez.

El otro punto fuerte de Chacarita fue Rodrigo Salinas. Coyete logró que la dirigencia contrate al delantero que llegaba de Los Andes habiendo hecho solo cuatro goles y se destapó esta temporada como goleador con 30 conquistas.

Salinas dejó el enigma en cuanto a su continuidad en el club más allá de su agradecimiento por haber sido llevado a San Martín.

Chacarita se había despedido de Primera en 2010 y dos años después cayó a la B Metropolitana, hasta que en 2015 volvió al Nacional B.

Mientras se discute el futuro de los promedios, Chacarita deberá afrontar la difícil tarea de soportar ese sistema en el futuro campeonato, el primero de la Superliga, que contemplará cuatro descensos.

Con el ascenso, los hinchas funebreros se ilusionan con llegar al 2019 en Primera División para festejar el cincuentenario del mayor logro: el título Metropolitano del 69, con una goleada de 4-1 a River en la cancha de Racing.