Mariano y Enzo Zidane protagonizan goleada del Real Madrid

MADRID (Paola Núñez | ESPN Digital) -- Los jóvenes de Real Madrid también golean. Los merengues vencieron por 6-1 a la Cultural y Deportiva Leonesa en la vuelta de los dieciseisavos de Copa del Rey para avanzar a la siguiente ronda con un escandaloso global de 13-2 y aumentar la racha invicta a 32 partidos.

Mariano Díaz y Enzo Zidane se llevaron la noche. El dominicano selló su primer titularidad en la campaña con una sólida actuación y un triplete mientras el mayor de los hijos de Zinedine Zidane celebró su debut oficial con el primer equipo con un golazo.

La eliminatoria de dieciseisavos de final de la Copa del Rey estaba definida desde la ida, disputada hace poco más de un mes en el Reino de León, cuando el equipo merengue cosechó una victoria por 1-7.

El encuentro de este miércoles se presumía como un mero trámite. Un momento para presumir a las joyas de la cantera y 'rodar' a Casemiro de cara al clásico del sábado. Para James, la enésima oportunidad de reivindicarse como jugador de jerarquía.

Y casi todo sucedió de acuerdo al plan. Casemiro jugó todo el partido para terminar de ponerse a tono. Los jóvenes de la cantera lucieron. Mariano, Enzo, y también el lateral Álvaro Tejero, el otro debutante de la noche, y Martin Odegaard, que jugó su primer partido con los mayores desde mayo de 2015. De James, apenas un chispazo. Se lo comieron los canteranos y su ambición.

El colombiano volvió a marcar en el Bernabéu después de siete meses, pero apenas fue una sombra del jugador incisivo y determinante que llegó a ser hace dos temporadas. De la jerarquía que debía tener el jugador más caro en la cancha, ni sombra. Y esta vez será difícil atribuirlo a la falta de continuidad cuando Mariano, que cargó con el peso del ataque, sólo había jugado 45 minutos en toda la campaña.

Díaz sepultó cualquier atisbo de esperanza para la Cultural, ya no de dar la vuelta al marcador, sino de sacar un resultado honroso en el primer balón que tocó. 22 segundos se tardó en adelantar a los suyos después de que Marco Asensio robara un balón a la salida de la Cultural y sirviera al dominicano, que remató de primera.

15 minutos después, el dominicano veía un tanto anulado por fuera de lugar después de avivarse adelantando a la defensa culturalista y cabecear a gol.

James, en tanto, batallaba para encajar. Y es que siquiera lo mandaron a una posición en la que pudiera lucir. El tridente en ataque estaba formado por Odegaard, Mariano y Marco Asensio, mientras el colombiano completaba la media al lado de Casemiro e Isco.

Los tres de adelante parecían entenderse a la perfección. Intercambiándose o buscándose constantemente mientras Dani, en los 45 minutos que estuvo en la cancha, se dedicaba a servirles balones con centros largos desde la banda.

James tuvo que correr más para llegar al área de vez en cuando o para poder intervenir en el juego, pues Isco lo tenía todo bajo control. En ese deambular para encontrar su lugar en el mundo lo pescó Dani con su enésimo centro al área para que el colombiano pusiera el 2-0 de un cabezazo.

Y hasta ahí el protagonismo de James. Mariano, con un gran gol de nuevo a pase de Daniel Carvajal, acaparó los reflectores poco después. No tuvo nada que hacer Leandro para detener el derechazo del dominicano después de lucirse bajando el balón con el pecho.

Poco antes del descanso la Cultural descontó a través de Yeray, por mucho, su jugador más talentoso. Un golazo desde fuera del área que levantó a los asistentes de la grada. El Bernabéu aplaudió el digno trabajo del equipo de la Segunda B y el de su delantero con más alegría de la que pusieron en celebrar el para entonces ya olvidado gol de James.

Un gol anecdótico, pues tras el descanso, los canteranos continuaron con su fiesta goleadora. Enzo, quien entró supliendo a Isco en el 46 para hacer su debut oficial, se mandó un golazo después de combinarse con Odegaard y Mariano. 4-1 y contando.

Después, una invasión al campo. Aunque no se completó ni la mitad del aforo del Bernabéu, un espontáneo burló a la seguridad y si no atravesó el terreno entero saludando a todos los jugadores fue porque se resbaló y tuvo que ser atendido en la cancha.

Pasada la interrupción, los merengues siguieron a lo suyo. Mariano acabó por conseguir su triplete con un cabezazo a un servicio desde la banda, esta vez de Tejero, pues para entonces el técnico ya se había reservado a Dani para el clásico. El cierre lo puso el defensa culturalista César, que en el intento de cortar un centro de Nacho a la contra acabó marcando en su propia puerta.