San Lorenzo respiró en la Copa al ganarle a la U. Católica

BUENOS AIRES (DyN) -- San Lorenzo logró una victoria agónica y clave por 2-1 ante la Universidad Católica, en el Nuevo Gasómetro, para mantenerse vivo en el Grupo 4 de la Copa Libertadores de América.

Por la cuarta fecha de la zona, el único gol del primer tiempo lo aportó el artillero de los azulgranas Nicolás Blandi, a los 35 minutos.

En el segundo período, a los 32 minutos, un zurdazo de Fernando Cordero consiguió el empate temporal y, cuando la crisis futbolística de San Lorenzo se agravaba al máximo, desniveló el juvenil Nahuel Barrios, de cabeza, a cinco del epílogo.

Los Cruzados estaban con un futbolista menos desde el minuto 34 del segundo capítulo, cuando fue expulsado el marcador central Benjamín Kuscevic, por doble amonestación.

Para San Lorenzo, y para el entrenador uruguayo Diego Aguirre, el triunfo era vital, dado que 2017 había deparado malos resultados en los dos frentes, en el doméstico y en el internacional, a tal extremo que en la Copa sólo disponía de un punto.

El grupo lo encabeza Flamengo, con seis unidades; seguido por la Católica, con cinco; y Atlético Paranaense y San Lorenzo, con cuatro.

Por este capítulo todavía deben enfrentarse los brasileños y lo que más le conviene al Ciclón es que en todo caso se escapen los cariocas.

En el primer episodio, San Lorenzo dispuso de la iniciativa y realizó los méritos indispensables para lograr la ventaja que consiguió en el minuto 36 Blandi, al recoger, en el segundo poste liberado, la pelota que surgió de un salto mayoritario de compañeros y adversarios.

Pero las urgencias a San Lorenzo le impedían desempeñarse con tranquilidad y ni Néstor Ortigoza ni Fernando Belluschi lo dotaban de la precisión que hacía tanta falta.

Además, los chilenos asumieron mayores riesgos y así fue que en el Nuevo Gasómetro creció una sensación de inseguridad futbolística.

Predominaba la impresión de que, si el local no lo definía pronto, el adversario era capaz de igualarle el tanteador y arruinarle definitivamente la noche y su permanencia en la Copa.

Y así, tras una réplica bien elaborada en lo colectivo, Roberto Gutiérrez habilitó a Cordero con un pase interior y el zurdo batió a Nicolás Navarro.

Para San Lorenzo la situación se complicaba más y más minuto tras minuto, a pesar de que ya tenía un jugador más, y Aguirre recurrió a dos juveniles para tratar de salvar la situación y el resultado imprescindible se concretó, porque Ortigoza hizo la pausa, buscó a Bautista Merlini, también por adentro, y el centro fue aprovechado por Barrios, un pibe bajito que acababa de entrar, pero saltó con el alma y de cabeza determinó el salvador 2-1.