Espanyol derrumba al Atlético en un momento clave

Alejandro García/EFE

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BARCELONA (Jordi Blanco, ESPN Digital) -- Sergio García, barcelonista de cuna y periquito de corazón, consiguió su primer gol en la Liga, trascendental para el Espanyol y fatal para el Atlético. Un gol que valió tres puntos de oro para el deprimido equipo de Quique Sánchez Flores y le provocó un subidón al Barça, que acudirá al Clásico del Bernabéu con la posibilidad de marcharse nueve puntos por encima del Atlético de Simeone.

Ganó el Espanyol por 1-0 porque lo mereció. Simple explicación de un partido con más pelea que fútbol, con más entrega que calidad y en el que las ocasiones de los locales acabaron por darles el premio en el minuto 88, cuando el empate se consideraba ya un mal imposible de solucionar para ambos equipos.

Gerard Moreno, Baptistao o Sergio García rozaron el 1-0 y desesperaron a Quique Sánchez Flores, impotente en la banda ante la pérdida de oportunidades que, debió sospechar, podían acabar por condenar a su equipo, que temía cualquier posible contra rival, que apenas si se producía.

El Atlético, con un ojo puesto en el Clásico del sábado y esperando rebajar la ventaja del Barça en una última jornada de año de la que esperaba mucho, no dio la talla a lo esperado y tuvo una evidente fortuna ante los errores en el remate del equipo blanquiazul.

Claro que también tuvo las suyas. Impotente Fernando Torres, Simeone quiso variar el empuje del ataque colchonero y le dio entrada a Gameiro en la parte final del choque. A los 76 minutos, no mucho después de que se anulase un gol a Godín por falta, clara, en ataque, el delantero francés se plantó solo ante Pau López. Y su remate fue a las manos del portero periquito, para desespero de un Simeone que para entonces ya comenzaba a temer el tropiezo.

Y al final llegó el premio, merecido, para el Espanyol. Y de rebote para el Barça, su gran enemigo. Cosas del fútbol, fue a través de un canterano del Barça que hace ya muchos años abrazó la causa periquita, un Sergio García que anotó su primer gol liguero de la temporada para escapar su equipo de los últimos puestos.

Y acabar con un año entero del Atlético sin perder lejos de su estadio en partido de Liga. Al cabo de 20 partidos (12 victorias y 8 empates), el conjunto de Simeone cedió, en el peor momento, una derrota que podría conducir la Liga hacia ya un dominio indiscutible del Barça si el líder es capaz de ganar en el Bernabéu.