Lluvia de goles en duelo de felinos en el Estadio Olímpico Universitario

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MÉXICO (Javier Rosas/ESPN Digital) -- Pumas y Tigres empataron 3-3, marcador en el que destaca la colaboración de Carlos González, quien hizo las tres anotaciones de los locales; mientras que para los visitantes marcaron Eduardo Vargas, Rafael Durán y Gignac.

Los locales salieron con una postura agresiva. Desde el silbatazo inicial buscaron la portería rival y a los seis minutos de juego les rindió frutos. Felipe Mora recibió de espaldas al marco el balón dentro del área, se dio la vuelta y disparó, Nahuel Guzmán atajó, pero dejó el rebote a Carlos González, quien con un potente disparo abrió el marcador.

Tras la anotación, los auriazules bajaron de intensidad, lo que permitió que los visitantes comenzaran a tomar el control del esférico, aunque no ocasionaban peligro. Fue con un disparo de larga distancia de Eduardo Vargas, quien con un tiro de pierna derecha venció a Alfredo Saldívar al 22'.

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Tigres mantuvo el dominio luego del empate. Las jugadas de peligro eran en la meta de los locales. En una jugada que nació en los botines de Javier Aquino llegó el segundo para los de Nuevo León. El balón terminó en Rafael Durán, quien de media vuelta disparó con la pierna izquierda para vencer a Saldívar.

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En la agonía del primer tiempo, la escuadra de la UNAM lo empató. Pablo Barrera desbordó por la banda derecha, mandó un centro retrasado, mismo que prendió de volea Carlos González, quien guardó el balón en las redes.

El dominio de los de Nuevo León se extendió al segundo tiempo. Y una vez más, la parcela de Aquino fue fundamental. Javier dribló a Alan Mozo, cedió a Gignac, quien de izquierda puso el tercero para los visitantes.

González firmó su tercer tanto de la tarde al 62'. La fórmula del segundo tanto se repitió. Centro de Barrera tras desborde por la derecha. Carlos brincó más que sus marcadores para de cabeza mandar el esférico a las redes.

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La lluvia impidió que los equipos tuvieran más llegadas de peligro, pues los resbalones y la velocidad en la que corría el esférico no permitió que los jugadores se asociaran para elaborar jugadas. Los últimos minutos estuvieron marcados por imprecisiones de ambas escuadras.