Lejos de tiempos seguros como los de los arqueros Miguel Angel Santoro y Carlos Goyén o de los habitados por defensores de gran jerarquía como Roberto Ferreiro, Rubén Navarro, Jorge Maldonado, Tomás Rolan, Miguel Angel López o Ricardo Pavoni, la última línea de este Independiente de momento a cargo de Alberto Tardivo y Guillermo Ríos cometió errores que dejaron el camino abierto para la derrota.

El primer gran error fue prematuro, apenas a los 4 minutos de comenzado el partido, y Luciano Figueroa se metió entre marcadores centrales para poner de cabeza el balón por encima del adelantado Damián Albil. El pase profundo para el 1-0 lo aportó Diego Erroz.

La segunda equivocación grave tampoco se demoró demasiado, ya que, a los 18, otra vez Figueroa, pero por abajo, se encontró favorecido por una defensa que pretendió dejarlo en posición prohibida y por un pase rasante y en diagonal de Luciano De Bruno para volver a batir a Albil.

El tercero y el cuarto tanto llegaron sobre el final del cotejo, cuando Independiente se jugaba al máximo y se exponía al todo. Los verdugos fueron Javier Cappelletti y César Delgado.

Sobre la hora Matías Vuoso al menos doblegó a un Laureano Tombolini de rendimiento óptimo.

El dolor de Independiente es por lo pronto de los más grande, pero además le aumenta la exigencia para la temporada próxima, en la que tendrá que luchar contra el riesgo del descenso.

Independiente era excesivamente permeable y a Central le quedó el cotejo preparado para meter respuestas e inflar todavía más la red del adversario.

Por puro amor propio Independiente trató de salir de la crisis, pero cuando cabeceó Javier Páez para el descuento fue Laureano Tombolini quien se estiró hasta ofrecer un córner como solución.

Una entrada profunda de Erroz estuvo a punto de formalizar la goleada, pero Albil salió rápido y tapó.

El local era endeble atrás y adelante se lo veía apasionado, desesperado por convertir, pero su jugador más peligroso, Matías Vuoso, se excedía en intentos individuales.

Con todo, Vuoso quedó frente a Tombolini, pero de nuevo se impuso el arquero.

Independiente sobre el final de la primera etapa daba la impresión de podía lograr un gol, pero ni bien lo atacó Central hubo un tiro libre que ejecutó Germán Rivarola y la pelota se escapó entre las manos y las piernas de Albil, pero luego se recuperó el guardavalla.

Franco Troche fue el último de los de Avellaneda que se arrimó a la conquista antes del entretiempo, pero su remate desde fuera del área grande generó otra atajada de Tombolini.

El segundo tiempo se jugó con Independiente al frente y Central fundamentalmente preparado para proteger a su arquero y a la diferencia obtendida en el parcial.

El entusiasmo de los rojos fue elogiable, pero el equipo jugó con las espaldas descubiertas y por eso el golpe fue muy duro.

SÍNTESIS DEL PARTIDO

INDEPENDIENTE (1): Damián Albil; Juan Carlos Ramírez, Javier Páez, Matías Villavicencio, Mariano Pernía; Franco Troche, Hernán Franco, Pablo Guiñazú; Federico Insúa; Emanuel Rivas y Matías Vuoso. Dupla técnica: Alberto Tardivo-Guillermo Ríos.
ROSARIO CENTRAL (4): Laureano Tombolini; Paulo Ferrari, Leonardo Talamonti, Daniel Díaz, Germán Rivarola; Diego Erroz, Marcelo Quinteros, Emiliano Papa; Luciano De Bruno; Federico Arias y Luciano Figueroa. Director técnico: César Luis Menotti.