"Todavía no tengo la velocidad y la fuerza necesarias para completar mejor cada jugada. Lo noto al correr y al saltar con los rivales. No llego al máximo de mis posibilidades. Además, tengo un kilito de más", reveló el "Pampa" Sosa, quien en estos momentos pesa 93 kilogramos.

Más allá de estas consideraciones, dijo que está muy confiado en que va a incrementar el nivel de la performance de su primer cotejo enfundado en la camiseta boquense, en especial por los compañeros que lo rodean en la ofensiva.

"Boca tiene muy buenos jugadores en todo el plantel, pero yo estoy muy tranquilo por los que me rodean arriba. De tres cuartos de cancha hacia adelante", fundamentó el "Pampa".

Sosa dijo que no teme ser resistido por la hinchada y en tal sentido añadió que "alguna vez me pasó en Gimnasia, cuando era más joven. En cambio, ahora es diferente. Tengo cuatro años de experiencia en Italia. Me va a ir muy bien en Boca", vaticinó Sosa.

Del mismo modo, minimizó haber sido reemplazado ante el conjunto santafesino: "Ya lo habíamos hablado con el técnico (uruguayo Oscar Washington Tabárez) en la semana y acordado que le iba a indicar hasta cuándo iba aguantar".

"Así pasó. No hay ningún problema. Lo mismo como cuando me comparan con (su colega, Martín) Palermo. Al contrario -enfatizó-. Es importante. El ha hecho muchísimos goles. Por otra parte, mi objetivo no es hacerlo olvidar, porque los ídolos nunca deben ser olvidados".

Por último, opinó que rente a Banfield, en el encuentro adelantado por la tercera fecha del torneo Apertura, a Boca le resultará "más complicado" sumar otros tres puntos.