Con el fallo del órgano federativo, al jugador se le cierran definitivamente las puertas del fútbol español durante al menos doce meses, en los que tendrá que buscarse una salida en el extranjero, opción que estaba pendiente de si finalmente era exculpado por el caso de supuesta falsedad de su pasaporte italiano.

Ante el temor de una posible sanción, el Tenerife lo dejó sin ficha profesional en la actual temporada, pese a que en el club insular siempre jugó como extracomunitario después de que se iniciaran las investigaciones sobre los papel presentó en su etapa en el Villarreal, en el que fue inscrito como comunitario.

Ya no tendrá que esperar a diciembre, cuando se reabrirá el mercado de la Liga española, para tomar una decisión sobre su futuro profesional inmediato.

Para colmo de males, el abogado de Marioni, Fernando Pérez Espinosa, teme que el Tenerife suspenderá la relación laboral con su representado, mientras que desde el club se ha indicado que se examinará el caso para llegar a la solución más beneficiosa para las dos partes.

Bruno Marioni, que llegó al Tenerife como cedido en mayo de 2001, para luego fichar por cuatro temporadas a cambio del pago de 700 millones de pesetas al Villarreal, jugó su último partido oficial con la camiseta blanquiazul ante el Athletic de Bilbao, un recuerdo amargo, ya que esa tarde se consumó el descenso a Segunda división.

Declarado transferible por la directiva del conjunto canario, el jugador, nacido en Paraná (Argentina) hace 27 años, estuvo el pasado verano en la lista de posibles compras de algunos equipos de Primera, como el Osasuna o el Alavés, si bien el estancamiento del mercado futbolístico impidió el traspaso por su alta ficha.

Durante su estancia en el Tenerife, Marioni jamás pasó inadvertido, ya sea por motivos agradables o desagradables.

Destacó, sobre todo, por erigirse en máximo goleador de su equipo la pasada temporada, con goles espectaculares como el que le marcó al Deportivo, tras un inverosímil "slalom" por medio campo, así como por su pundonor, llegando incluso a jugar con el tabique nasal roto tras un encontronazo con el céltico Pablo Coira.

Pero también fue noticia por denunciar la existencia de "topos" en el vestuario blanquiazul, por batir el récord de la expulsión más temprana en Sevilla, y se vio involucrado, junto a su compatriota Lussenhoff, en unos graves incidentes con simpatizantes en los aledaños del Heliodoro Rodríguez López, cuyas imágenes dieron la vuelta al mundo.

- CRONOLOGIA DEL "CASO MARINONI":