A Riquelme se le acusó de inventarse una excusa para quitarse de en medio en un partido en el que iba a ocupar plaza de suplente y en el que la continuidad de Van Gaal dependía del resultado.

El argentino, que hoy llegó de su país para incorporarse al equipo tras las vacaciones navideñas, explicó: "Todo esto son comentarios de alguno al que no le caigo bien y que trata de hablar mal de mí".

Juan Román Riquelme insistió en que "nunca" tuvo problemas con Louis van Gaal y justificó su descarte previo al último partido de Liga.

"Hice lo que tenía que hacer, porque tenía una molestia", aseguró Riquelme, quien subrayó que, desde su llegada al Barcelona, está "tranquilo", convencido de haber hecho "las cosas bien".

De la llegada a su ex equipo, Boca Juniors, de Carlos Bianchi, el candidato para suplir a Van Gaal en caso de derrota barcelonista en Mallorca, manifestó: "Soy hincha de Boca y ojalá que Bianchi le pueda dar muchos títulos".

Riquelme evitó polemizar sobre los rumores que apuntan a su posible marcha del Barcelona y destacó su agradecimiento a la afición azulgrana, junto a su deseo de devolvérselo con títulos.

Respecto a los diez días de descanso de los que ha dispuesto la plantilla, el más largo de los clubes que militan en Primera División, el argentino consideró que "será bueno si el domingo se gana".

Sobre este asunto, el holandés Phillip Cocu se pronunció en una línea similar: "Ante el Recreativo habrá que demostrar que estas vacaciones nos han ido bien". Cocu consideró que, "quizá", los jugadores del Barcelona necesitaban "más descanso que nadie para limpiar la cabeza".