"Todos están buscando transformar el Inter-Roma en un Batistuta contra el Roma, pero es un error. No es así, no es lo que siento y no es lo que deseo", comenta el delantero argentino, en entrevista al diario deportivo romano "Corriere dello Sport Stadio".

Batistuta, que abandonó el Roma el pasado enero, remarca que no le interesan las polémicas: "Con el Roma he tenido una relación de trabajo, sin gratitudes ni ingratitudes, una relación a la par. El momento más bello fue el título liguero".

El argentino confiesa que no se esperaba una Roma en crisis esta campaña: "En el verano, en la pretemporada, estaba absolutamente convencido de que podíamos ganar el 'scudetto'. La plantilla, en mi opinión, era fuerte. No pensaba que jugaría yo tan poco. Pero el fútbol es así: el Roma esperaba ganar y yo jugar".

"A veces se hacen pronósticos que no son respetados. Esperaba de convencer a (Fabio) Capello (entrenador del Roma), pero no fue así. No he hablado mal de él cuando yo estaba en el Roma y me dejaba fuera, y no lo hago ahora que estoy en Milán. Soy una persona equilibrada cuando doy un juicio sobre las personas del fútbol y deseo seguir comportándome de igual forma", apunta.

Batistuta en la entrevista vuelve a incidir que no hubiera dejado este enero el Roma de no haber sido llamado por (Massimo) Moratti (presidente y accionista mayoritario del Inter), por lo que habría esperado a la conclusión de su contrato (30 de junio).

Tras indicar que ha sido acogido "muy bien" en Milán se muestra confiado en que el Inter logre el título liguero: "¿El punto de fuerza del Inter?, las ganas de lograr el 'scudetto' que falta desde hace tiempo".

Sobre la actual crisis económica que vive el fútbol, señala: "Es mundial y la situación es difícil. Los clubes italianos han gastado demasiado, los presidente han exagerado en conceder sueldos faraónicos, pero tomarla sólo con ellos es un error pues en muchos casos han cedido a las presiones de la gente, deseosa de campeones".

"En Italia hay muchos clubes considerados 'pequeños' donde se puede hacer un juego de óptimo nivel, sin que afecte en el terreno de los balances, en donde los presidentes pueden trabajar sin gastarse mucho dinero. Ahora hemos llegado al fondo y se precisa dejar de gastar tanto", opina.

De su futuro indica: "Todo está aún abierto. Si ganamos el título liguero es posible que Moratti me pida el seguir y yo aceptaría con gran felicidad. En el caso contrario, no habrá problema alguno. Mi primera elección es el extranjero, Inglaterra, un gran club inglés".