Ronaldo se tomó una vacación más larga que el resto tras ser figura de la Copa Mundial de junio, que ganó Brasil con ocho goles suyos, y todavía no se está entrenando con sus compañeros.

A su deficiente estado físico se suma una situación muy delicada con el club, ya que el brasileño buscó por todos los medios ser transferido al Real Madrid, diciendo que no quería seguir en Italia.

Los dos clubes estuvieron negociando, pero la semana pasada descartaron la operación al no ponerse de acuerdo.

Un dirigente del Inter que pidió no ser identificado dijo el lunes que recién el miércoles Ronaldo comenzará a entrenarse con el resto del plantel. Agregó que ello obedece a que Ronaldo ``no está en condiciones (físicas) de entrenarse a la par de los demás''.

En el Inter jugaría Christian Vieri, a pesar de que tiene molestias en una pierna, al tiempo que Fabio Cannavaro, recién adquirido al Parma, disputaría su primer partido oficial con el equipo milanés.

Sporting, mientras tanto, no podrá contar con sus dos hombres de punta: el brasileño Jardel, máximo goleador europeo de la temporada pasada, en que marcó 42 tantos, enfrenta una situación similar a la de Ronaldo, ya que pidió ser transferido y no se está entrenando con sus compañeros.

Jardel lo atribuye a que está recibiendo tratamiento por una supuesta depresión, derivada de la separación de su mujer.