"Ronaldo quiere recuperar la felicidad y las mejores condiciones para jugar el fútbol", dijo Martins para justificar la pretensión de su representado de abandonar el Inter, al que llegó en 1997 y con el que tiene contrato hasta 2006.

Según Martins, no se trata de una presión sobre el Inter para mejorar el contrato: "No es problema de dinero. Ronaldo quiere reencontrar la sonrisa que ha perdido en Milán y que Madrid le puede dar".

La opción del Real Madrid, que ha expresado públicamente su interés por el delantero brasileño, es la única que se plantea en estos momentos, en palabras del representante.

"Es inútil hablar de otros contactos, de la misma manera que es inútil hablar de dinero. No es una cuestión económica. Ronaldo siempre ha respetado su contrato y quiere continuar haciéndolo, pero ahora su condición psicológica es diferente, no quiere seguir jugando en el Inter", dijo.

La importancia de las palabras de Martins es que Ronaldo ha puesto en él la responsabilidad de todas las gestiones y es a través del que se ha manifestado en estos días, ya que el jugador no ha querido comentar a la prensa nada de su situación.