Durante todo el día de ayer las oficinas de Rayados y el Estadio Universitario lucieron largas filas, las cuales por momentos crecían o disminuían, pero nunca se terminaron.

Cabe señalar que las filas iniciaron desde la noche del martes, pues varios aficionados se quedaron a dormir afuera de las instalaciones de ambas instituciones, buscando asegurar su lugar para el tan anhelado encuentro.

Por lo pronto la venta es exclusiva para los abonados de ambos clubes, siendo hasta el fin de semana cuando se empiecen a vender los boletos para el público en general. En el caso de los Tigres, se les venderá un boleto más para el que así lo desee

Otra gratificación más para los seguidores de los dos equipos, fue que las directivas decidieron mantener los mismos precios que tuvieron durante el torneo regular. En Tigres el más barato es de 65 pesos en sol general y 590 el más caro en Vip-Palco, mientras que en Rayados 70 es el de menor precio, en general, y 500 el de mayor costo que es el Superpalco.