Estados unidos reaccionó. En los partidos de la tarde, en la modalidad foursomes, el equipo norteamericano consiguió dos de los cuatro puntos en juego y detuvo el drenaje de las dos sesiones pasadas.
Un Bubba Watson recargado y Webb Simpson, que estuvo muy preciso con sus hierros y con el putt, dominaron desde el principio y durante todo el partido a Sergio García y a Alex Noren. Los europeos no jugaron bien y el cansancio empezó a pasarles factura. Los americanos no actuaron por la mañana y eso fue una ventaja. La repetición de la pareja de García y Noren no solo fue un reconocimiento a lo bien que estaban jugando, sino también a la escasez de recursos confiables que tiene Thomas Bjorn, el capitán del equipo europeo. Watson y Simpson nunca mostraron a sus rivales la mínima grieta y terminaron el partido en el hoyo 16, 3&2.
El otro pilar de Estados Unidos durante la tarde del sábado fue la pareja de Jordan Spieth y Justin Thomas. Ellos jugaron contra Ian Poulter y Rory McIlroy. El partido empezó favorable para los europeos, pero a partir del hoyo 4, donde Estados Unidos ganó con un bogey, los europeos se diluyeron. A partir de allí, y con un Jordan Spieth muy inspirado con el putter, fueron demoliendo a los rivales para terminar el partido en el hoyo 15, 5&4.
Stenson y Rose volvieron a ganar su punto para Europa con un juego bien coordinado. Derrotaron a la sólida pareja de Dustin Johnson y Brooks Koepka, que esta vez no estuvieron tan afinados. El partido llegó hasta el hoyo 17 donde un par de Europa fue suficiente para ganar el hoyo y el partido 2&1.
La pareja estelar que empieza a transformarse en un mito en esta Ryder Cup, Francesco Molinari y Tommy Fleetwood, o mejor dicho “Moliwood”, como empezaron a llamarlos en estos días, volvió a traer para Europa un punto fundamental.
Habrá que preguntarse si fue una buena idea de parte de Thomas Bjorn, el capitán del equipo europeo, volver a poner a McIlroy a la tarde. El norirlandés no jugó bien por la mañana. Ganó junto a Sergio García pero más que nada por el mérito del español. Y decididamente Rory lo hizo mal por la tarde en el foursome, junto a Ian Poulter. Otra decisión que podría ser cuestionable fue no poner a Paul Casey. El inglés estaba jugando bien y esta cancha parece hecha a medida para él.
En la conferencia de prensa, los dos capitanes, por separado obviamente, dejaron ver entre líneas algunos de los sentimientos que los dominan. En primer lugar, a Thomas Bjorn se lo vio cansado, como si estos dos días de Ryder le hubieran consumido mucha energía. Preocupado por la presión que significa tener una ventaja considerable, pero de ninguna manera definitiva.
Furyk, por el contrario, estaba ansioso. Empezaba a contestar las preguntas antes de que el periodista terminara de formularlas. Parecía enojado con la situación en la que estos dos primeros días de competencia acaban de ponerlo. Como si fuera algo que no estaba para nada en sus planes. Había también algo de enojo subyacente. Y muchas veces en estos casos, si el enojo se dirige adecuadamente puede ser un excelente combustible para impulsar una reacción positiva.
Los partidos individuales de este domingo comienzan al mediodía. Serán los siguientes:
Rory McIlroy vs Justin Thomas Paul Casey vs Brooks Koepka
Justin Rose vs Webb Simpson Jon Rahm vs Tiger Woods
Tommy Fleetwood vs Tony Finau Ian Poulter vs Dustin Johnson
Thorbjorn Olesen vs Jordan Spieth Sergio García vs Rickie Fowler
Francesco Molinari vs Phil Mickelson Tyrrell Hatton vs Patrick Reed
Henrik Stenson vs Bubba Watson Alex Noren vs Bryson DeChambeau
Europa solo necesita ganar 4 y ½ puntos para quedarse con la Copa Ryder. Estados Unidos necesita 8 para retenerla. Mucho para ver este domingo tienen todos los fanáticos del golf del mundo. El evento más importante de este deporte culmina en un escenario único y dramático. La cancha de Le Golf National en Paris.