LOS ÁNGELES -- Chris Paul quería seleccionar sus palabras cuidadosamente al describir la vergüenza que sintió después de perder 105-98 contra los New Orleans Hornets el lunes por la noche.
Paul fue sorteado por Nueva Orleans en el 2005 y pasó sus primeras seis temporadas en la NBA con los Hornets. Todavía lo considera un hogar lejos de casa y sigue haciendo obras de caridad allí con los niños en su programa después de clases. No quería faltarle el respeto al equipo y a la ciudad al tiempo explicaba la peor derrota de los Clippers en la temporada.
Hemos perdido contra un equipo muy... déjame elegir mis palabras... no es un equipo muy talentoso, pero está bien entrenado", dijo Paul. "Los veo jugar todos los partidos que disputan. Una cosa sobre (el entrenador) Monty (Williams) es que van a jugar duro. Si miras sus juegos, en un par de ellos se fueron a tiempo extra, y han tenido un par de explosiones, que fueron contra Denver y Oklahoma City. Ellos van a jugar duro.... Con esos muchachos jugando así y nosotros esperando hasta el último cuarto para encendernos, va a ser duro".
Paul ha estado en Los Angeles durante un año, pero aún así, al hablar con los periodistas cita las palabras sabias de Williams después de los partidos y con sus compañeros, cuando les dan consejos. Todavía se mantiene en contacto con su ex entrenador de manera regular. Puede arrollar el record de 4-9 de los Hornets casi tan bien como pudo hacerlo con el 8-6 de los Clippers. No es que Paul no ha cerrado el capítulo de su tiempo en Nueva Orleans, pero todavía es cercano a muchos dentro de la organización.
Algunos podrían tomar el comentario de entrenamiento de Paul como un pinchazo al entrenador de los Clippers, Vinny Del Negro, pero no lo es. Se trata simplemente de Paul dando crédito a un entrenador que considera un amigo y uno de los mejores motivadores que jamás haya jugado. A Paul le gusta jugar para Del Negro, y si no fuera así, nunca lo anunciaría o insinuaría pasivamente a través de los medios de comunicación. Estamos hablando de un jugador que tranquilamente orquestó su salida de Nueva Orleans sin ni siquiera una vez exigir un intercambio públicamente.
Este es, sin embargo, un momento crítico para Paul y Del Negro y su relación. Ambos están en el último año de su contrato con el equipo, y los Clippers están aparentemente haciendo todas las decisiones ahora para asegurar que Paul este tan cómodo y feliz como sea posible.
Los Clippers contrataron al ex vicepresidente de personal de los jugadores de los Hornets, Gerald Madkins como director del equipo de operaciones de básquetbol cuando la posición quedo abierta después que Gary Sacks reemplazó a Neil Olshey como gerente general.
Cuando descubrieron que Chauncey Billups no volvería por lo menos hasta diciembre, firmaron a Willie Green, quien fue compañero de Paul en Nueva Orleans. Y recientemente contrataron al director de comunicaciones de New Orleans, Denis Rogers, cuando su director de mucho tiempo, Rob Raichlen, dejó el equipo después de 20 años.
Si Williams no hubiera firmado una extensión de contrato de cuatro años con Nueva Orleans en agosto, probablemente habría algunos rumores de que podría ser el próximo Hornet en trasladarse a Los Angeles. Así las cosas, Del Negro tendrá que ganarse a Paul y ganar los juegos en esta temporada para conseguir una extensión de contrato similar de los Clippers en la temporada baja.
Antes de que pueda hacer eso, debe encontrar una manera de hacer que los Clippers jueguen mejor defensivamente. Sus últimos dos rivales han anotado al menos 104 puntos y dispararon por encima del 50 por ciento desde el campo.
"Nuestra defensa es terrible, es horrible, es casi vergonzoso", dijo Paul. "El hecho de que los equipos sientan que pueden venir y anotarnos puntos todas las noches, no podemos jugar así. No va a ganar consistentemente. Tenemos que tener más orgullo en eso, ya sea en casa o en la carretera. Los muchachos no pueden mirarnos a los ojos y sentir que pueden pasarnos. Esto comienza con todos nosotros. Tenemos que jugar con un sentido de urgencia y entender que cuando usted no es un gran equipo en esta liga, los equipos vienen a tú ciudad y es lo que sea, pero tenemos objetivo en nuestras espaldas. Tenemos que jugar de esa manera".
Del Negro, normalmente reservado y lleno de lugares comunes después de los partidos, arrancó en su equipo cuando se dirigió a ellos después del partido y al hablar con los periodistas después del partido.
"Fue un partido incómodo para nosotros", dijo Del Negro. "No tuvimos nada de nuestros grandes, no tuvimos nada de nuestro banco, no tuvimos nada de nadie. Ellos marcaron la pauta. Fueron a donde quisieron cuando quisieron. Llegaron a la línea, nos conformamos con tiros en salto y no los atacamos como deberíamos. Nadie va a sentir lástima por ti. Vas a obtener lo que te mereces".
Puede ser que sea temprano en la temporada, pero la respuesta de los Clippers a su actual racha de cuatro derrotas en fila en sus dos próximos partidos en casa contra los Minnesota Timberwolves y Sacramento Kings, podría tener repercusiones a largo plazo para un equipo que se encuentra actualmente en una encrucijada crítica con su jugador estrella y su entrenador jefe.